Diario de León

SIN AFANES POLÉMICOS

Mucho más que tres puntos

Publicado por
MARTÍN
León

Creado:

Actualizado:

EN REALIDAD son sólo tres puntos en juego en el partido de rivalidad provincial, Ponferradina-Cultural. Tres puntos, los mismos que premia cualquier victoria en la Liga. Pero el carácter singular del partido hace que tengan un valor añadido, la satisfacción de haber triunfado sobre el rival por excelencia. Así han sido, desde siempre, y seguirán siendo los encuentros entre ambos equipos. Las aficiones los esperan con dimensionada expectación. Los comentarios tienen un eco sonoro, partidista (cada uno ve el cristal del color con que lo mira) antes, en y después del lance. Cada cual cuenta el pronóstico como quisiera fuera en la realidad, y cada cual contará la feria según le haya sido en ella. Serán muchos los aficionados que desde León se desplazarán a Ponferrada, pero particularmente estimo que no llegarán a los que en tiempos pasados -ni mejores ni peores, sencillamente distintos- llenaban la arteria principal de Ponferrada en multitudinario desembarco de los trenes especiales. Bocata de tortilla en el zurrón, tan grande como las esperanzas. Tiempos del inolvidable campo de Santa Marta; en tono, un poco menor, en el de Fuentesnuevas. Ahora espera el coqueto Toralín. Tampoco serán iguales los cánticos y los temas de ánimo de unos y de otros. Los tiempos cambian que es una barbaridad, como en la romanza de la popular zarzuela. Tampoco se hará parada y fonda en Manzanal del Puerto, lugar de encuentros expedicionarios al calor y color del ambiente, y al sabor del extraordinario jamón, regado por los caldos bercianos. Y el pulpo, como vianda preciada en el aditamiento de la tortilla para la comida. Tiempos de rivalidad sana, con canciones, digamos, de «picadillo». La ida siempre era alegre y optimista, el regreso podía ser radiante, o parodiando el dicho taurino ¿Dónde vais...? ¡Al partido...! (exultante de alegría con la victoria). ¿De dónde venís?, del partido... (la misma respuesta pero con decaido acento y mueca en el rostro de desencanto. Así una temporada y otra. Las no muchas anuales ausencias, por no coincidir en la categoría, eran comentadas con marcado pesar; porque siempre la visita a Ponferrada ha sido señuelo irresistible para los aficionados, como la presencia en León también siempre lo ha sido para los bercianos. El pulpo, los pimientos, el jamón, la morcilla, el merodear por la zona de bares, los cánticos y la pasión... Todos los ingredientes que, aquí y allá, rodean a los llamados derbys locales, provinciales o autonómicos. Llega en esta ocasión el encuentro, cuando la primera vuelta del calendario otea la curva de vuelta que marca el final de la recta de ida y espera la decisiva recta de vuelta. Mucho camino por recorrer aún; pero analizando la situación de los equipos en la tabla clasificatoria, es obvio que el botín de la victoria puede reafirmar a la Cultural entre los puestos de premio y a la Ponferradina a volver a estar en ellos. Llega la Cultural después de haber tropezado en la Liga con el Burgos, y de haber perdido la eliminatoria copera frente al Atlético de Madrid, en un partido bien jugado, con extraordinario derroche de fuerzas que mereció mejor final. Ese generoso esfuerzo, puede pasar factura; pero sobre la merma del cansancio suele imponerse, en estos singulares lances, la motivación extra que tienen. Un nuevo Ponferradina-Cultural... Domingo grande para los aficionados.

tracking