Montecarlo brinda a Carlos Sainz el estreno para su último mundial

El Rally de Montecarlo arrancó oficialmente ayer jueves, aunque la verdadera competición no comenzará hasta hoy en la zona de los Alpes franceses, en Gap, el centro neurálgico de la prueba el primer día, antes de ceder el protagonismo a Mónaco a partir del sábado. En las carreteras de Sosple tuvieron lugar las primeras pruebas oficiales de la temporada y con un cielo cubierto se pudo ver por primera vez en acción a los Peugeot 307CC y Mitsubishi Lancer. Peugeot y Mitsubishi tendrán que mejorar, sobre todo el japonés, aunque el 307 parece, después de los tiempos logrados, que va a ser competitivo desde el principio del Mundial. Por su parte, el finlandés Hirvonen, uno de los representantes de la nueva generación de pilotos, estrenó el Subaru y se mostró contento con su comportamiento. En el Mundial se está produciendo una revolución y ya hay una nueva generación de pilotos, siendo Carlos Sainz el último reducto de los clásicos, de los viejos rockeros de la carretera, y el único de estos que sigue siendo competitivo. Gronholm, con el Peugeot 307, fue el más rápido, pero no todos fueron al máximo, lo que falseó el resultado. El finlandés de Peugeot logró un tiempo de 6'10.2 después de cuatro pasadas por el tramo. Duval, con el Ford, se quedó a una décima, por delante de Loeb. Sainz, que se dedicó a mejorar los reglajes, marcó un registro de 6m17.7s, mientras que Loix, con el otro Peugeot, hizo 6m20s, por lo que la primera toma de contacto no sirvió realmente para saber las prestaciones reales de los coches. Lucha Peugeot-Citroën El Montecarlo de este año tiene una gran importancia, si se desarrolla en condiciones climatológicas normales, ya que dará la pauta de lo que pueden ser las pruebas de asfalto. Lo importante será ver la competitividad de los nuevos coches, especialmente del Mitsubishi y el Peugeot, aunque el equipo japonés, como le ocurre al francés, cuenta con un piloto de garantías. Los pilotos de Peugeot que se repartirán el segundo coche, el español Solá, el italiano Galli y el finlandés Solberg, no parecen capaces de poder luchar por los primeros puestos, y además, con un coche por evolucionar. La lucha entre Peugeot y Citroën será lo más importante del Rally, aparte de ver los progresos de Subaru y saber si el Ford, cuyo presupuesto se ha visto recortado, tendrá la fiabilidad necesaria. La nieve por el momento no parece que aparezca en el Montecarlo, ya que sólo había algún resto en los dos primeros tramos y desapareció. Lo que habrá será hielo y las típicas condiciones cambiantes del Montecarlo, que lo convierten en una carrera única por su dificultad.