España prepara su adaptación a la moqueta para la cita con Chequia

El cuarteto español que se enfrentará al equipo de la República Checa en la Copa Davis realizó ayer una doble sesión de entrenamiento. Los ensayos se realizaron sobre la moqueta del Centro de Exhibiciones de esta ciudad. Por la mañana, trabajaron Rafael Nadal y Tommy Robredo por espacio de 90 minutos. Por la tarde, Robredo tuvo como rival a Feliciano López y Rafael Nadal a Alberto Martín. Todos pudieron comprobar la rapidez de la pista. «Es algo que ya esperábamos, así que no nos causa sorpresa», comentó Arrese, que desde el viernes se sentará en la silla reservada al capitán de España. La selección española también dedicó parte de la jornada a participar en una rueda de prensa con los periodistas checos. Arrese explicó que «las bajas de dos jugadores como Ferrero y Moyá son importantes, pero todos los tenistas que están aquí tiene suficiente calidad para que podamos sacar la eliminatoria adelante». Arrese no quiso avanzar cuáles serán los jugadores que disputarán los dos primeros individuales. «Conoceréis nuestra decisión el día del sorteo», indicó el técnico. La prensa checa está persuadida de que Robredo y Feliciano López serán los elegidos para la jornada de apertura de la eliminatoria. Empate con los checos El enfrentamiento entre España y la República Checa, en la primera eliminatoria del Grupo Mundial de la Copa Davis de tenis, se disputará entre viernes y domingo en el Pabellón B del recinto ferial de Brno, y podría servir al equipo de Jordi Arrese para romper el empate entre ambos países, que se enfrentaron en cuatro ocasiones. Praga se rindió en 1965 a la magia de Manolo Santana, que obtuvo los tres puntos que disputó. España se impuso aquel año en la cancha central de Stvanice en Praga por un rotundo 4-1. En el palmarés de encuentros mutuos, la antigua Checoslovaquia triunfó en 1931 y 1971, mientras que los españoles lo hicieron en 1965 y 1972, año en que vencieron al histórico equipo integrado por Jan Kodec, ganador del torneo de Wimbledon en 1973. Ahora, sin los experimentados Juan Carlos Ferrero y Carlos Moyá, que causaron baja por lesión, el equipo finalista de la última edición se presenta en suelo checo con una plantilla muy joven, aunque todos ellos figuran entre los cincuenta primeros puestos de la clasificación mundial. Hewitt pide más tiempo El australiano Lleyton Hewitt considera muy escaso el tiempo transcurrido entre la final de la Copa Davis 2003, en diciembre, y la primera ronda de 2004, el próximo fin de semana, y, tras pedir una programación más racional, ha puesto al español Juan Carlos Ferrero como ejemplo de las consecuencias de un calendario sobrecargado. El ex campeón de Wimbledon cree que los dos finalistas de la anterior edición deberían estar exentos de jugar la primera ronda en la competición del siguiente año. «Creo que los australianos entienden tanto sobre tenis y sobre la Copa Davis como el resto del mundo, y muchos no pueden comprender por qué ganamos el trofeo en diciembre del año pasado y tenemos que defenderlo inmediatamente», declaró Hewitt. «No tiene sentido. Los dos finalistas de una Copa Davis deberían tener libre la primera ronda, o, quizá, el torneo tendría que disputarse cada dos años, lo que lo haría mucho más especial», añadió. El jugador, vencido en cuartos de Australia por el luego campeón, el suizo Federer, agregó que las lesiones que sufre Juan Carlos Ferrero son el resultado de una programación dura y desgastadora. «Juan Carlos tuvo un fin de año muy intenso con la Copa Masters, la final de la Copa Davis y la semifinal del Abierto de Australia de este año. Y la semana que viene tendría que haber viajado a la República Checa para defender a su país en la edición 2004 del trofeo. Por eso no me asombra que muchos tenistas jueguen lesionados», concluyó el número uno australiano.