«La Casilla es casi inexpugnable, pero es peor oír botar el balón»

Baloncesto León trabajó ayer intensamente para preparar su próxima cita en la liga LEB que tendrá lugar mañana en La Casilla bilbaína, una pista de gratos recuerdos para el equipo después del éxito conseguido en los play-off del año pasado, pero esta circunstancia puede volverse contra el equipo que dirige Ángel Jareño. La pista bilbaína es famosa por la presión de sus gradas, en su pabellón antiguo que «ruge» con las acciones de su equipo. Pero Baloncesto León ha demostrado este año que le gustan las gestas y siempre se recuerda lo ocurrido en Menorca, donde el equipo llegó en su peor momento y arrancó una victoria en una pista en la que nunca había ganado. Otras victorias como la de La Palma -en el mejor momento de los isleños- o la de los Lobos llevan al equipo a un moderado optimismo por su rendimiento a domicilio. Paco Martín destacó ayer los simbolismos de La Casilla en declaraciones a la Agencia Efe: «Es una cancha mítica aunque desgraciadamente esté fuera de la primera liga desde hace varias temporadas, es un poco al estilo del Magariños, con un sabor especial de la vieja escuela». El veterano alero advierte que el equipo leonés, que viajará mañana mismo a Bilbao, se encontrará con un recibimiento duro. «Aunque sea una cancha casi inexpugnable es mejor eso que cuando se oye botar el balón o marcar jugadas al base». Y es que en la presente temporada el Bilbao tan solo ha perdido un partido en casa, aunque su irregularidad le lleve a acumular cinco derrotas en otras tantos desplazamientos desde primeros de diciembre. Paco Martín se mostró convencido de que el equipo logrará «recuperar el buen tono de juego de la primera vuelta» y reconoció que a nivel personal no se encuentra en un buen momento y no está cómodo en la pista. Muchos datos Los cruces de León con Bilbao tienen mucha historia. El actual club vasco surgió en el 2000 pero es heredero del antiguo Caja Bilbao al que el club leonés también ganó un play-out en la ACB. Pero el equipo que ahora dirige Ángel Jareño también tiene otro precedente curioso a la hora de medirse a los vascos. El año pasado, cuando León estaba en pleno arranque de la temporada y aún sumido en dudas ganó el partido de la fase regular en La Casilla. Era una victoria importante para el equipo entonces dirigido por Quino Salvo, pero al club vasco le dolió especialmente porque el Bilbao llevaba 18 meses en esos momentos sin haber perdido ni un solo partido en su pabellón. Después llegó el play-off por el ascenso y León volvió a hacer historia a costa del equipo vasco al convertirse en el primer club que superaba una situación de 2-0 en contra en una eliminatoria. El partido tendrá de nuevo como protagonista a Javi Salgado, el base formado en León, al que tendrá que medirse el vasco Urreizti. Salgado no pasa por un momento dulce e incluso se barajó en las últimas semanas la posibilidad de que el Bilbao fiche otro base para reforzar su dirección de juego.