El árbitro se negó a la suspensión
García Bestilleiro, después de ver las condiciones del campo, decidió disputar el encuentro
La nieve caída sobre el césped del estadio Antonio Amilivia no se había tocado hasta la decisión del colegiado García Bestilleiro de disputar el encuentro. El árbitro gallego al ver in situ el campo de juego se negó a la suspensión del encuentro. La capa de nieve que cubría el césped del Municipal leonés carecía de la consistencia necesaria para evitar la celebración del compromiso deportivo, programado para las cinco de la tarde, tres horas aproximadamente después de la llegada del colegiado a las instalaciones del Amilivia. Entre los empleados y dirigentes culturalistas, según pudo conocer este periódico, la preferencia que se imponía era que no se jugara un partido tan trascendental para los intereses culturalistas en las circunstancias que presentaba el Amilivia. Desde el seno interno del club, se pensaba que el terreno no favorecía el estilo de juego local, sino que se adecuaba a las pretensiones del Mirandés.