El dilema del 9 marca el primer día de la selección en Gijón

Tras un prolongado período en el que España siempre echó de menos a un 9 tradicional del que debe presumir toda gran selección, lo que obligaba a Raúl a ejercer como ariete sin serlo, Iñaki Sáez se ha encontrado de pronto con el dilema de tener que elegir para la Eurocopa dos plazas entre un ramillete de goleadores en excelente forma. La lista de candidatos incluye a Fernando Torres, casi con un puesto asegurado para Portugal, Morientes y Salva, que disponen de una gran oportunidad de reivindicarse en el amistoso del miércoles ante Dinamarca. Pero no son los únicos, ya que el técnico no se olvida de Tamudo, Mista y hasta de Tristán. Para empezar, Sáez dejó claro que los minutos de que disfrute el renqueante Raúl -«si lo he convocado es para jugar», aseguró-, serán para actuar como segundo delantero, no como única referencia en punta. El preparador agradece que ahora exista más competencia, pero aclara que esta convocatoria no es definitiva. «He llamado a dos delanteros no habituales que ahora están haciendo goles, pero eso no quiere decir nada. Es sólo una prueba. También cuento con Mista, Tamudo...». De sus palabras se desprende que, por el momento, ninguno de los postulantes al '9' le agrada del todo, máxime si se recuerda que no hay futbolista español que haya superado los 20 goles en Liga que Sáez siempre dijo quiere que posea como marca mínima el delantero centro de la selección en la Eurocopa. «Quedan todavía muchos compromisos para que concluya la temporada y seguro que alguno alcanza esa marca», le respondió un optimista Torres, que ante los nórdicos participará en su cuarto compromiso con la absoluta. Morientes, por su parte, jugará su encuentro internacional número 31. No me lo tomo como un examen. Que haga un buen partido no quiere decir que tenga plaza segura para la Eurocopa y si juego mal tampoco significará que esté descartado. Me tomo la llamada como un gran premio a una buena temporada y a un buen momento», explica el madridista cedido al Mónaco. Morientes ve muy positivo que haya tantos delanteros donde elegir y deja el «bendito problema» en manos del seleccionador. Por su parte, Salva Ballesta insiste en que la selección «es lo máximo a lo que puede aspirar un futbolista» y añade que, «como persona, defender a tu país está muy por encima de todo y jugar una Eurocopa sería lo más grande». Salva cree que la «competencia será positiva para la selección».