EL SILBATO
Miragaya López, el lunar más negro
EL COLEGIADO coruñés Miragaya López volvió a demostrar que pese a ser este su tercer año en la categoría, ésta le queda demasiado grande. El árbitro estuvo mal en la aplicación de la ley de la ventaja, siendo la más grave cuando cortó un contragolpe a Cuyami, que se iba solo hacia la portería leonesa, en el minuto 78. Tampoco se mostró correcto en el apartado disciplinario. Las cartulinas amarillas mostradas a Rubén Vega, Paulino, Adriano e Iván Casquero fueron injustas. En esta última, hubo una falta anterior de Cuyami al llevarse el balón con la mano (minuto 72). Debió de haber amonestado a Landáburu, a Gómez y a Serrano por duras entradas. Se inhibió de las faltas en el área palentina, siendo las más importantes una mano en el minuto 36 y un agarrón a Paulino en el minuto 71. El público le toreó desde la grada, lanzando el balón varias veces al terreno de juego cuando ya se jugaba con otro. Aunque aspira a pitar play-off, debería pensar en salvar la categoría, aunque con actuaciones como la de ayer será difícil.