El Valencia y el Real Madrid deciden variar su estrategia con los árbitros
Morientes, Raúl y Helguera, en la concentración de la selección
El Real Madrid y el Valencia han decidido cambiar de estrategia con respecto a los arbitrajes en una recta final en la que el equipo blanco se siente perseguido por los colegiados y el actual líder de la Liga prefiere mantenerse al margen ahora que le acompañan los resultados y depende de sí mismo. El Madrid ha abandonado su habitual política de respeto hacia los árbitros y a través de la línea dura de su vestuario ha reabierto la polémica, mientras que el Valencia ha preferido dar un giro y en el momento decisivo prefiere respaldar la labor de los jueces. Las quejas de Figo y Roberto Carlos por la actuación de Pérez Burrull en elBernabéu encontraron ayer la respuesta del valencianista Ayala, que no comparte las declaraciones de los madridistas y considera que no se debe presionar a los árbitros. «Son personas que hacen su trabajo con responsabilidad y pueden tener una mala tarde como la tenemos nosotros, pero no creo que los colegiados se equivoquen a propósito», declaró el argentino, después de que Figo y Roberto Carlos denunciasen que la campaña del Valencia está siendo muy efectiva en el tramo clave. El Madrid se considera víctima de una conspiración arbitral desde que hace dos meses y medio el Valencia explotó por el penalti de Marchena a Raúl que evitó la victoria che en el Bernabéu, y los pesos pesados del vigente campeón han roto con sus duras acusaciones a Pérez Burrull la austeridad que siempre han proclamado los dirigentes blancos. Este fin de semana, la presión será para el castellano-leonés Rodríguez Santiago, que dirigirá el Deportivo-Real Madrid, y para el gallego González Vázquez, que arbitrará el Valencia-Betis. Para el Barça-Espanyol ha sido designado el andaluz Medina Cantalejo, y aunque los dirigentes azulgrana no desean hurgar en la herida madridista, dos de los miembros del cuerpo técnico azulgrana, Stoitchkov y Beguiristain, también se han sumado a la guerra y han aprovechado para atacar al eterno rival e ironizar sobre el hundimiento blanco desde que José María Aznar perdió las elecciones y dejó su puesto al culé Rodríguez Zapatero. «Que pregunten a Aznar. Ahora, como no está, ya pierden», respondió Stoitchkov cuando se le pidió su opinión sobre la crisis del Madrid.