Luces y sombras

TRES VICTORIAS y una derrota; pero la derrota pone cendales grises a la jornada. Luces y sombras. Tropiezo que puede ser grave -el tiempo lo dirá, un tiempo ceñido al fin de semana próximo-, para Baloncesto León. Cultural y Ademar, aunque de manera distinta lograron sendas victorias. Bien comenzó Baloncesto León su lucha por el ascenso. Primer partido del playoff y primera victoria. La puerta de la esperanza se abría ampliamente. Todo hacía pronosticar la reválida de un nuevo triunfo en el segundo encuentro, muy importante para viajar a Menorca con la tranquilidad de tener asegurado un posible desempate en cancha propia, en el Palacio de Deportes y contando con una afición que bien mereció, por su apoyo y entrega, el regalo de la segunda victoria. Ahora hay que viajar a la isla balear con el objetivo irrenunciable de lograr una victoria. Si se logra se recupera lo perdido, de lo contrario una temporada más habrá que decir tristemente adiós, con el pesado lastre que supone para el futuro. Y es el caso, señora, que al menos la prórroga en el segundo partido estuvo talmente al alcance de la mano, Se perdió, cuando el empate se palpaba en el ambiente, y de la alegría que se asomaba en el rostro de los espectadores se pasó al rictus de amargura. Oportunidad perdida. Y las perdidas son hojas desprendidas del árbol de la ilusión. Del árbol de la ilusión y del chopo del ascenso. Ademar llegó, luchó y venció, cruzando, como Julio César, el Rubicón que lleva a la buena orilla deseada, la orilla de la Copa de Europa de la temporada venidera. No dieron facilidades los del Bidasoa, al contrario, lucharon con tesón para no perder el partido haciendo trabajar a los ademaristas de firma. La Cultural venció, pero no convenció. Ante el colista que apenas contabiliza en su acervo de la tabla de clasificación una triste victoria, pasó dificultades y hasta fatigas para llegar a buen puerto, después de remar contra corriente en los últimos compases del partido, hasta el punto de que, en el Amilivia, se escucharon voces pidiendo la hora. Mal síntoma; pero, lo que son las cosas, como Burgos y Conquense también dan síntomas claros de fatiga la clasificación se encuentra ahora a tiro de piedra. Visita a Burgos, llegada de la Ponferradina al Amilivia y clausura de la fase regular en Cuenca. El camino para la clasificación se adivina aparentemente despejado.