El Cueto sorprende a los profesionales por su nivel
La PGA Europea apenas ha modificado algún pequeño detalle para aumentar su exigencia
La aparente bisoñez que representa el campo El Cueto de San Miguel del Camino ha llevado a varios de los profesionales que competirán mañana en el Peugeot Challenge Tour a sorprenderse de su alto nivel de exigencia. Por su fecha de nacimiento y sin referencias propias, muchos de los golfistas esperaban un recorrido asequible y se han encontrado con un itinerario que no concede demasiadas treguas ni posibilidades para los errores. El trabajo de diseño del acreditado golfista Manolo Piñero ha propiciado que los representantes de la PGA Europea apenas hayan tenido que corregir aspectos del recorrido, como la amplitud de algunas calles, la altura del césped que rodea los greenes o el par del hoyo 12, que ha pasado a 4 en vez del 5 originario. Juan Quirós, ganador este año de la primera prueba de este circuito nacional, aseguró ayer que está «muy gratamente sorprendido por el campo, con los greenes reviraíllos característicos de los diseños de Manolo Piñero», además de que mostró su felicitación «por el buen estado en el que se encuentra El Cueto». El andaluz auguró una gran competición debido a que «hay hoyos impresionantes y de gran calidad», lo que obligará a los participantes a pulir «la estrategia del juego». La única cita del Peugeot Challenge Tour en territorio español se abrirá mañana y aprovechará las dos primeras jornadas como filtro, tras el cual los 60 primeros y empatados superarán el corte y se disputarán el trofeo durante el fin de semana. Pablo Riestra, gerente del León Club de Golf, señaló en la presentación de la prueba realizada ayer que «la cita supone una oportunidad única de ver en acción a la élite del golf» e invitó «a toda la gente a que se acerque hasta las instalaciones de El Cueto para disfrutar del espectáculo». Para aumentar esta prestación, el sábado se celebrará una clase excepcional de varios de los 176 participantes en la prueba, en la que se exhibirán sus golpes. La organización se encargará de marcar los espacios de observación en el recorrido.