Diego Maradona abandona el hospital, aunque sin la preceptiva alta médica

El ídolo futbolístico argentino Diego Maradona, aún muy delicado de salud, dejó por sorpresa la pasada madrugada la clínica de Buenos Aires donde estuvo hospitalizado 12 días y decidió por voluntad propia seguir la convalecencia en una residencia privada, tras sentirse tan recuperado que pedía un balón para jugar en la sala de terapia intensiva. Maradona, de 43 años, hizo de las suyas, impaciente, harto de estar en una cama de enfermo, rodeado de monitores, sueros y mascarillas de oxígeno, y con el consentimiento de su médico personal, Alfredo Cahe, logró acordar la salida de la Clínica Suizo-Argentina. A las 21.00 hora española, en un operativo de película, se subió a una camioneta color rojo con cristales tintados y salió por la rampa de la clínica del barrio de La Recoleta donde estuvo al borde de la muerte tras ingresar en gravísimo estado el domingo 18 de abril. En una maniobra concertada en secreto con la policía, fue interrumpido el tráfico sobre la avenida Pueyrredón.