Jesús Gil se encontraba a última hora de la tarde de este miércoles en estado de
, según el segundo parte médico del día facilitado por la clínica Cemtro de Madrid. El máximo accionista del Atlético de Madrid ha experimentado
tras el infarto cerebral masivo que sufrió el pasado domingo y que ha obligado a los médicos a conectar a Gil a ventilación mecánica. Mientras que el sucinto parte médico ofrecido al mediodía calificaba el estado de Gil de
, sólo cuatro horas después, a las 17.30 horas, fue emitido un segundo parte bastante menos esperanzador que provocó el pesimismo en la familia del ex presidente rojiblanco. El hijo de Jesús Gil, Miguel Ángel Gil Marín, abandonó por la tarde la clínica madrileña con evidentes gestos de preocupación, temiendo un fatal desenlace después de que el estado de su padre haya empeorado. Transcurridas las 72 horas que los doctores consideraban claves su situación es cada vez más complicada.