El Valladolid se suicidó poco a poco
El Real Valladolid ha ido desperdiciando las facilidades que le han ofrecido los rivales a los que se ha enfrentado y que también se juegan la permanencia a la desesperada como Celta y Espanyol y se hunde irremisiblemente en el pozo del descenso a segunda división. El conjunto vallisoletano, que finalizó la primera vuelta con 25 puntos en novena posición, se las prometió muy felices y comenzó a entrar en una fase de conformismo, especialmente acusada tras vencer en Málaga y lesionarse de gravedad su máximo goleador, Ariza Makukula. Curiosamente, el Valladolid había cedido a uno de sus delanteros, Sergio Pachón, al Getafe, donde está anotando con facilidad y llevando a su equipo hacia posiciones de ascenso. La lesión de Makukula en el partido frente al Málaga en la jornada vigésima primera, donde el Real Valladolid venció por 2-3 y acumuló 29 puntos, fue el punto de inflexión en el que comenzó a caer en picado el cuadro blanquivioleta. La caída fue en picado y el cese de Fernando Vázquez no ha paliado la situación.