Sainz quiere restar en Grecia su desventaja con el liderato

El español Carlos Sainz afronta el Rally Acrópolis de Grecia, sexta cita del Mundial, con la intención de mejorar su situación en la clasificación, y lo hará en la prueba más dura del certamen y en la misma en la que hace catorce años logro su primer triunfo mundialista. Tras la disputa de las cinco primeras pruebas de calendario, el líder del campeonato es el compañero de equipo de Sainz, Sebastien Loeb, que se ha impuesto en tres de las carreras (Montecarlo, Suecia y Chipre). El francés dispone de 35 puntos, uno más que el estonio Markko Martin (Ford) -ganador en México-, siete por delante del noruego Petter Solberg (Subaru) -actual campeón mundial y vencedor en Nueva Zelanda- y once de renta sobre el finlandés Marcus Gronholm (Peugeot), que se impuso sobre las pistas en Chipre pero que fue desposeído del triunfo y del liderato del Mundial diez días más tarde por una irregularidad en el motor de su vehículo. Carlos Sainz es quinto con 19 puntos. Loeb, subcampeón mundial e 2003, conoce el Acrópolis, aunque su carrera del año pasado fue muy corta ya que se retiró en el primer tramo de la prueba. El francés consiguió la victoria en 2001, cuando aún estaba en la categoría júnior, y acabó séptimo en 2002. Carlos Sainz ha ganado tres veces el Rally Acrópolis. El español consiguió la victoria en 1990, 1994 y 1997 y estuvo a punto de hacerse con otra la pasada temporada, pero acabó en segunda posición, por detrás de Markko Martin. La habitual consistencia de Sainz podría ser de nuevo una gran ventaja. «Catorce años después de mi primera victoria en el Mundial sería muy bonito sumar una buena cantidad de puntos y reducir la distancia que me separa de los líderes del campeonato», ha comentado Sainz. Otro claro candidato al triunfo es Markko Martin, que hace un año ganó aquí su primera prueba mundialista en un rally que se adapta muy bien al Focus, un coche que ha ganado las cuatro últimas ediciones, las tres anteriores con el escocés Colin McRae. Peugeot ya demostró la fiabilidad de sus 307 WRC en Chipre, en donde, y a pesar de las descalificaciones, logró la victoria deportiva (Gronholm) y el quinto puesto (el también finlandés Harri Rovanpera). El Rally Acrópolis, que este año cumple su quincuagésima primera edición, es la prueba más dura del calendario tras la desaparición del Safari de Kenia, debido a las altas temperaturas y, sobre todo, a la rudeza de sus caminos de tierra, en los que la resistencia y la fiabilidad de las mecánicas es primordial.