El Levante está decidido a hacer realidad el sueño del ascenso este mismo domingo

El Levante vive días de alegría y de ilusión, puesto que este sábado puede sellar el ascenso a la Primera División si vence en el campo del Xerez o incluso si empata dependiendo del resultado del otro duelo estelar de la cuadragésima jornada, el Numancia-Alavés. El equipo de Manuel Preciado no quiere esperar más y su intención es clara y contundente. Dejar zanjado el sueño de volver a la elite cuarenta y un años después a pocos kilómetros donde ganó su anterior partido, Cádiz capital, de manera contundente. El Numancia, aún herido por su polémica derrota en el feudo del Getafe, recibirá el domingo por la mañana a otro rival directo como el Alavés, segundo clasificado. El cuadro soriano se quedó fuera del trío de ascenso, aunque con los mismos puntos que el equipo getafense y a uno que los alavesistas, por lo que la imprescindible victoria le devolvería al grupo de los sueños. El Alavés, lógicamente, no quiere dar otro paso atrás después de ceder un empate ante el Leganés, más que nada porque un triunfo le acercaría notablemente al regreso a Primera.