Medio equipo olímpico busca en el Magistral el título nunca logrado

«Nunca he ganado el Magistral aunque estuve muy cerca de hacerlo, pero este año espero sacarme la espina». Con estas palabras, un tanto apesadumbradas, se manifestaba el gran maestro Alexis Shirov a este periódico durante la presentación en Madrid del torneo. Algo parecido le sucedía a nuestro mejor jugador olímpico Paco Vallejo quien a pesar de haber jugado ya varios magistrales no ha tenido la suerte de poder figurar en el podio de los vencedores. Esta tarde, a las 16.30 horas, se inicia la que sin duda será la edición más joven del torneo y la que marcará el comienzo de una nueva era de jugadores «niños» que se harán con la hegemonía del ajedrez en menos de un lustro. Un ajedrez que ha estado signado por la presencia de nombres míticos cuyas edades no sobrepasaban lo 20 años. Leko, Ponomariov, Karjakin, Radjabov, han dejado en León su impronta, su categoría y sus conocimientos y, como ha manifestado el director del Magistral, el próximo año estará en León el más joven aún. Un gran maestro noruego de 13 años llamado Magnus Carlsen que ya ha entablado con Kasparov, ha derrotado a Karpov, ha ganado a una retahíla de grandes maestros y está dispuesto a pulverizar las hazañas de sus colegas bajando la media de edad para hacerse con el título mundial antes de los 19 años. Variantes alternativas A la vista de estos resultados y de lo que se les viene encima a los «provectos» grandes maestros de treinta años como Shirov, Svidler, Anand, Ponomariov y una larga lista de nombres míticos, los «popes» del ajedrez afilan sus armas, desempolvan sus variantes más oxidadas y buscan como arqueólogos a destajo nuevas fórmulas que les permitan al menos ofrecer, durante algunas horas, resistencia a esos «bebés-monstruo» que ya desde que nacen llevan el ajedrez en la sangre. Shirov, intentará por todos los medios a su alcance encaramarse al primer puesto porque sabe que el tiempo juega en su contra. Conoce perfectamente que si a los treinta años no se alcanza el máximo título no podrá hacerlo después. Es ahora cuando se encuentra en el cenit de sus posibilidades, donde los reflejos, la memoria, el golpe de vista y la intuición cabalgan parejas en lo que ha poder de la mente se refiere. Cualidades le sobran a este letón discípulo de ese otro mago del tablero llamado Miguel Tal al que emula en lo que a crear «fuego en el tablero», inquietud y lucha sin cuartel se refiere. Paco Vallejo lo tendrá aún difícil para conseguir llevarse de León elpreciado galardón. Su inexperiencia y sus escasos torneos en la élite serán sus principales handicaps. A su favor, ese espíritu de lucha que siempre la ha caracterizado. Esa ambición por ganar y no conformarse con medios puntos ¿Será esta XVII edición el comienzo de una escalada imparable en su carrera hacia el máximo título? Lo veremos en el 2005.