Pestano: «Estoy muy fuerte, pero 68 metros no son nada»

Mario Pestano, tinerfeño afincado desde hace ocho años en León, no quiso ponerse límites el año en que alcanzó los 68 metros con el disco pero marcas como ésta, con la que -asegura- «no te comes una rosca», han dejado de sorprenderle porque se ve «fuerte como un toro, pero con cabeza». El lanzador canario añade a su estado físico este componente cerebral para marcar diferencias con los Mundiales de Edmonton'01, donde llegó con una marca de 67,92 metros, con ilusiones, incluso, de medalla y sin embargo fue eliminado en la primera ronda. «Era un chiquillo con una marca de 68 metros. Fue el comienzo y aprendí muchas cosas que guardo para mí. Metí la pata pero está olvidado», declaró Mario Pestano, que ha debutado en la Liga de Oro con un cuarto puesto y una notable marca de 65,98 metros que le valió para batir a «mister disco», el alemán Lars Riedel. Ahora Pestano ha logrado estabilidad técnica, visita mucho al fisioterapeuta para que no se le reproduzca la lesión del codo derecho. Hace seis meses tuvo que someterse a una operación de limpieza de la articulación porque las inserciones se le estaban fibrotizando. Mucho entrenamiento «Era un problema de entrenamiento excesivo y de abuso de brazo en el lanzamiento. Ahora no soy tan brusco con el disco, trato de implicar a todo el cuerpo en el lanzamiento, no tirar tanto de brazo», explicó. El martes pasado, en Zaragoza, Pestano alcanzó los 68 metros, un registro redondo que, pese a su categoría, no le produce una particular fascinación. «Las marcas no me obsesionan. Mi único objetivo es quedar entre los ocho primeros en los Juegos de Atenas. Quiero estabilizarme en 66 metros pero los 68 ya no me sorprenden. Mi cabeza dice que pueden ser más, todavía». «Los 67 metros», explicó, «fueron la típica marca que te sale cuando eres joven. No sabes bien lo que haces pero tienes la fuerza de un toro. Ahora sigo teniendo la fuerza de un toro, pero con cabeza. Trabajo mucho con la psicóloga de la Federación Española porque me veía un poco estancado». Pestano ha tardado tres años en mejorar su récord de 2001 (67,92). Con los 68, sin embargo, no quiere meterse presión. «No me afecta, mentalmente. Con 68 metros no te comes una rosca en alta competición. Los grandes ven esa marca y se ríen», dijo el atleta canario en alusión al lituano Virgilius Alekna, el húngaro Robert Fazekas y el alemán Lars Riedel.