Rubio: «Sumanos un punto y estamos más cerca del ascenso» Prolegómenos con acento musical

Contento a medias por el resultado, el técnico ilerdense se reconoció dolido por un empate que «debió traducirse en una victoria nuestra ya que dispusimos de numerosas ocasiones, primero para adelantarnos en el marcador en la primera parte y luego para sentenciar en la segunda cuando el marcador nos favorecía. Pero aún así un punto es un punto y ya estamos un poco más cerca de nuestro objetivo que no es otro que el ascenso». Para Miguel Rubio, «creo que el Lleida ha hecho méritos suficientes para llevarse los tres puntos. En la primera parte tuvimos cuatro claras ocasiones y en la segunda, haciendo el partido que nos interesaba logrando un gol que parecía definitivo. Después nos ha faltado mentalizarnos para y en una jugada muy rara nos metieron el tanto del empate. Así es el fútbol y así hay que tomárselo. Nada más». Para el entrenador del Lleida, «a pesar del empate hemos dado un paso adelante muy importante y seguimos dependiendo de nosotros para acabar primeros. Con tres puntos lo lograremos y a pesar de la decepción que supone este empate vamos a intentar ganar al Celta B en nuestro estadio y ofrecer así a nuestros aficionados el ascenso». Apoyo significativo Precisamente sobre la afición ilerdense que en un número superior a las 300 personas acudió al Nuevo Antonio Amilivia, Miguel Rubio se mosró muy contento. «Ellos han viajado muchos kilómetros para apoyarnos y me queda el mal sabor de boca de no poderles devolver su apoyo con un triunfo. Pero a buen seguro que se lo daremos dentro de una semana en Lleida ante el Celta B». Sobre los incidentes entre algunos jugadores y el propio Miguel Rubio con Paulino, el técnico catalán no quiso incidir. «Son cosas que pasan en este tipo de partidos en los que te juegas tanto pero que no deben pasar de ahí. A algunos le pueden los nervios pero hay que saber leer el partido y no resaltarlas más de lo debido. Son cosas que pasan pero que deben quedarse como una simple anécdota». Sobre su rival, la Cultural, Miguel Rubio reconoció que había sido un gran adversario. «Ellos lo intentaron todo pero nosotros supimos responderles con un juego serio y seguro que nos llevó a un resultado favorable. Hemos jugado ante un gran rival al que no le dejamos hacer su juego y al que pudimos superar», aseveró el técnico. Sobre sus opciones fue claro. «Nosotros tenemos la última palabra y dependemos de nosotros mismos. Sabemos que con un triunfo no hace falta mirar a otros resultados y en eso nos vamos a esforzar. El próximo domingo debe ser nuestro día y espero que el equipo responda al máximo».