El Real Madrid, justo campeón tras vencer al Barça en cuatro zarpazos (4-1)
El buen juego desplegado por el equipo merengue encontró su recompensa en su efectividad
El Real Madrid se proclamó brillante y justo vencedor de la tercera edición del trofeo internacional infantil Ciudad de León, tras deshacerse del FC Barcelona en la final, después de firmar con goleadas todas sus intervenciones. El equipo merengue hizo gala de una efectividad demoledora. Sus primeros cuatro remates terminaron en gol, aunque uno de ellos fue invalidado por posición de fuerta de juego del realizador, algo que acusó más de lo previsto en conjunto azulgrana. El partido en sí resultó vistoso, con dos equipos desarrollando un fútbol de alta escuela, tratando muy bien el balón y manejando espléndidamente la situación. Todos los intervinientes dejaron muestra de su calidad, diferenciándose un equipo de otro en su capacidad ofensiva, en la que se mostró muy superior el conjunto madrileño. Con un Moreno inconmensurable en defensa; Martínez y J. Robles mandando en la parcela ancha; y Jon y Torres, sobre todo éste último, en camicaces del área, el Real Madrid cimentó su triunfo, anulando además a Iago, el mejor jugador del equipo y posteriormente del torneo, bien secundado por Fran, Kusi y Enric, que poco pudieron hacer ante la efectividad de su rival. Los dos goles madridistas en los primeros cinco minutos del partido pesaron como una losa en el equipo blaugrana, hasta el punto de ir cediendo en su empuje ante la fuerza del marcador y la seguridad defensiva mostrada por el cancerbero madrileño y su línea de retaguardia, que imposibilitaban cualquier intento del Barça por acortar diferencias. Sólo en los últimos instantes del partido Kusi logró su objetivo superando al cancerbero merengue, consiguiendo el gol del honor para el subcampeón.