Floja actuación española en la primera jornada del British

El inglés Paul Casey, en su tercer Open Británico, y el francés Thomas Levet, ganador la semana pasada en el Open de Escocia de Loch Lomond, dominan la primera ronda de este tercer Grande de la temporada con una tarjeta total de 66 golpes (-5). En las últimas once ediciones, exceptuando el triunfo de Paul Lawrie en Carnoustie en 1999, la victoria ha ido a parar a jugadores americanos y surafricanos. Darren Clarke, Thomas Bjorn, Thomas Levet, Jesper Parnevik han tenido la oportunidad de ofrecer una victoria europea, pero se han quedado a las puertas. Casey, que falló el corte en los dos últimos Open que ha disputado, en Muirfiel y en Royal St. George, y que no contaba mucho en las estadísticas, salió al campo acompañado de unos de los favoritos del torneo, el zurdo Phil Mickelson, que termino con una tarjeta de 73 golpes (+2), lejos de los puestos de cabeza. Tampoco el francés Levet estaba entre los favoritos, sobre todo tras su victoria la semana pasada que le dejó bastante agotado. «Fue una de las razones por las que llegué tan tarde al campo (el martes), porque el lunes me dediqué a descansar, a atender a todas las llamadas de los amigos y periodistas que querían felicitarme y hablar conmigo. La verdad es que el teléfono no dejaba de sonar. Y me tomé con calma esta semana», dijo el francés tras terminar una vuelta casi perfecta en la que sólo cometió un bogey, en el hoyo 10. Un sólo error cometió Ernie Els y le costó la cabeza. Fue en el hoyo 17, par 3 de casi 200 metros, un mínimo en el golpe de salida y su bola fue a parar a uno de los búnkeres que protegen el green. «Era uno de los golpes más difíciles a los que me he enfrentado en mi carrera», comentó Els, cuando su bola quedó varada cerca del borde. Intentó sacarla en dirección a la bandera, pero el talud del búnker le devolvió la bola que quedó semienterrada. El doble bogey le dejó el marcador con dos golpes bajo el par del campo (69) y le alejó de los puestos de honor. García se cayó de las apuestas a la primera de cambio con un inesperado +4 en su marcador y Tiger Woods, mantuvo el tipo hasta el final con una tarjeta bajo el par del campo, 70 (-1) que deja las espadas en alto y le da opciones a una posible reacción del número uno del mundo. Todavía se pueda dar el duelo Els-Tiger que todo el mundo espera. Sergio García, mal Sergio García salió con ganas al campo y con la confianza de saber que su juego se encuentra en un buen momento de forma.