Ademar rehúsa otra vez la oferta del THW Kiel por Kristian Kjelling

En el verano del año 2002, al Ademar le dio por bajar la trapa para que la moda de comprar en su plantilla no se convirtiera en costumbre. Se habían ido Íker Romero, Alberto Entrerríos y Juancho Pérez, y la llegada de Kristian Kjelling a mitad de temporada amenazaba con convertirse en escala en vez de destino. El puñetazo encima de la mesa se concretó en la ampliación del contrato del noruego por cuatro temporadas, lo que servía de excusa para elevar su cláusula de rescisión: desde inicio de campaña hasta el mes de mayo, quien quisiera llevárselo debía desembolsar 500.000 euros; mientras que, a partir de ese mes hasta finalizada la pretemporada siguiente, el montante se doblaba para alcanzar el millón de euros. Pese a la carlanca monetaria puesta en el cuello del nórdico para posibles mordiscos, THW Kiel ya se lanzó durante la campaña 2003-2004 en su busca. En el pasado mes de febrero, inmersos en plena competición y con grandes aspiraciones en la Copa EHF (que finalmente ganarían tras acabar en la final con el Altea), los alemanes ya intentaron cerrar la contratación del jugador marista. Los cantos de sirena atrajeron a Kjelling, aunque, más Apolo que Ulises, se quedó en la orilla y sin barco en el que zarpar. Aquel noruego al que se le mezclaba el castellano con la dureza de las consonantes nórdicas olvidó con el tiempo que estaba «muy contento de seguir en León», y solicitó a los responsables maristas que negociaran su salida. Visto que el interés de los alemanes por Kjelling no iba parejo con la desenvoltura de su chequera, Juan Arias dio carpetazo al asunto, saludó con la mano desde la puerta y esperó a que mayo recordara a los navegantes que el precio ya era de un millón de euros. Las aspiraciones del conjunto de Noka Serdarusic para la presente campaña, donde la Copa de Europa se sitúa como objetivo principal, han obligado a que su secretaría técnica redoble la búsqueda. Finalizada la labor de rastreo la cartera de trabajo dejó dos nombres sobre la mesa: el barcelonista Jerome Fernández y la fijación por el noruego Kristian Kjelling. Descartada la operación con el central galo por el portazo en las narices del Barcelona, los representantes del Kiel han vuelto este verano a descolgar el teléfono con la esperanza de que la retórica supla a la autoridad del maletín del dinero con la suma estipulada en el contrato del noruego. Por segunda vez en medio año, ni las cantidades convencieron al Ademar ni los alemanes al banco, por lo que Manolo Cadenas espera sin temor alguno la presencia de Kjelling en la pretemporada leonesa. Por el momento, el noruego no tendrá que saludar a su llegada al vestuario tras las vacaciones a demasiadas caras desconocidas. Sólo el central defensivo Viran Moros y el portero Ole Erevik estrenan camiseta, y, si hay que fiarse de las palabras del técnico natural de Valdevimbre, puede que sean los únicos. 1396927554