El Promesas jugará un año más la final del Villa del Cúa

El cartel era el mismo y la final también lo será. El Promesas Ponferrada se deshizo en la tarde de ayer del Atlético Bembibre por un cómodo 0-3, con lo cual se clasificó para la final, que tendrá los mismos contendientes que en la edición del 2003. El equipo ponferradino estuvo mejor asentado en el terreno de juego, sobre todo desde que marcó el primer gol. Sin embargo, en la primera media hora el Atlético Bembibre presionó más e incluso por momentos llevó el peso del encuentro conducido por Iván Blanco. Fue un pase de la muerte el que permitió a Sergio inaugurar el marcador y marcar su primer gol de la pretemporada con la camiseta berciana. Sergio fue el más destacado en la escuadra de Manolo Tomé en la primera mitad. Villafañe brilló menos. A pesar de jugar de mediapunta, bajó muy atrás a construir juego y no lució tanto. Alberto no pudo seguir con su racha goleadora (4 tantos en la pretemporada). Dos faltas botadas al área y mal defendidas por los rojiblancos permitiron a Pablo Ruiz y a Ministro cerrar el marcador. Ninguno de los tres jugadores que anotaron ayer lo habían hecho aún. Tomé utilizó un sistema en la primera parte (3-4-1-2) y en los últimos ocho minutos del partido. El resto del tiempo probó con un 4-4-2. Davinchi, a prueba con los blanquiazules disputó unos aceptables 45 minutos. Los rojiblancos no inquietaron demasiado el marco de David y Manu en el partido. La mejor ocasión la tuvo Guti en una falta botada directamente casi desde un córner y a la que respondió bien el portero leonés en el segundo tiempo. El equipo estaba casi en cuadro y Carlos Rivas optó por experimentar cosas y jugadores. En especial quiso ver las evoluciones de los juveniles. Hoy el Fabero será el rival para intentar alcanzar la tercera plaza.