El Promesas vence, pero no convence en el Villa del Cúa
El equipo de Manuel Tomé no tuvo problemas para deshacerse del Arenas en la gran final
El Promesas Ponferrada se alzó con el trofeo Villa del Cúa después de imponerse en la final al Arenas. El equipo de Manolo Tomé venció sin problemas, aunque demostró que le falta frescura y puntería. De hecho, la primera parte el Promesa tuvo casi una decena de ocasiones, sobre todo a cargo de Marcos, pero la falta de puntería impidió que durante los primeros cuarenta y cinco minutos el conjunto ponferradino se adelantase en el marcador. El Arenas comenzó con un juego alegre y entusiasta, presionando al Promesas y con algún acercamiento al marco defendido por Manolo sin demasiado peligro. Tomé volvió a utilizar el esquema que parece será el que pondrá en liza en la Liga durante los primeros sesenta minutos, y dejó el 4-4-2 para el último tercio del encuentro. Después de las ocasiones de Marcos, Villafañe, Alberto y Carpio durante la primera parte, tuvo que ser Davinchi, que salió tras el descanso, el que marcase el primer tanto del equipo blanquiazul. Fue un centro de Carpio desde la izquierda, toca Vila en el primer palo y Davinchi con el portero ya en el suelo envía al fondo de la red cuando sólo se llavaban transcurrido veintiún segundos. En este segundo tiempo el Promesas ya jugó mucho más cómodo y sólo un lanzamiento de falta por parte del local Pablo inquietó el marco ahora defendido por David. Trascurrida la media hora un balón robado por Davinchi sirvió para que Gil Vidal sentenciara el partido con un remate a placer al meteralizar el 0-2, dándole de nuevo el trofeo en litigio al Promesas Ponferrada.