España se aferra a su estado de gracia para reafirmar su liderato

El partido entre España y Croacia, que se juega hoy, decidirá el primer clasificado del grupo A, en un encuentro en el que los españoles quieren acabar con el maleficio de Croacia en los últimos tiempos. El equipo que consiga la victoria se medirá el martes con el cuarto clasificado del otro grupo en cuartos, pero en el caso de España, un triunfo también servirá de revancha tras las victorias de los croatas en el campeonato del mundo de 2003 y en el de Europa de este año. Para la selección española, Croacia ha sido un rival muy complicado en los últimos tiempos y parte de la historia menos grata del equipo nacional se ha escrito en partidos en los que los croatas también han sido protagonistas. Además, el equipo que prepara Lino Cervar es un buen conocedor del balonmano español, ya que en los clubes de este país se conoce bien a jugadores como Metlicic, Dzomba, Losart o Ivano Balic. Esta circunstancia ha provocado una mentalización especial en los jugadores españoles, que esperan que esa fuerza les dure de cara a los siguientes encuentros. Un empate es suficiente La única ventaja en esta ocasión para el equipo de España es que el empate ante Croacia le sirve para mantener la primera posición del grupo, ya que la diferencia de goles favorece al equipo que prepara Argilés, puesto que en el caso de los españoles es de 25 tantos y en el de los croatas, de 9. En estos momentos, las únicas dudas que existen en España giran en torno al interés de jugar contra un determinado rival en el cruce de cuartos, es decir, si es mejor jugar contra el cuarto, para lo que hay que ser primero, o contra el tercero, para lo que hay que ser segundo. Lo que ocurre es que este problema no tiene solución puesto que cuando España se mida con los croatas, la clasificación del otro grupo estará sin decidir. Hora: 10.30 de hoy