Cinco motivos básicos para lograr medalla

1-La calidad individual. Vivi es la número uno de la modalidad de dobles desde hace tres años. Su bagaje de experiencia no ha parado de crecer. Lleva ya 27 títulos y seis Grand Slam. Encima, no ha descuidado su formación como jugadora de single y su nivel continúa siendo alto. Conchi, por su parte, posee una calidad individual fuera de toda duda y siempre le ha gustado el juego por parejas. por lo que domina la disciplina como nadie. 2-Pareja equilibrada. Sus estilos se complementan. Vivi ha llegado a dominar el juego en la red como nadie. En situaciones normales, bola que atrapa delante, punto que se anota. Su volea es mortal, pero esa labor se hace aún más efectiva gracias a la calidad de Conchi desde el fondo. Son, la una para la otra, el complemento ideal. Conchi juega con una profundidad y unos efectos que han facilitado mucho la tarea de rematar de Vivi durante el torneo. 3-La motivación. Desde que supieron que iban a formar pareja convirtieron su participación en los Juegos en uno de sus objetivos prioritarios de la campaña. En la primera parte de la temporada, el único hueco que tuvieron para jugar juntas fue en la Copa Federación contra Suiza. Dos semanas antes de venir a Atenas, se apuntaron en el torneo de Los Ángeles. Llegaron a la final y esos cuatro partidos les vinieron de maravilla. 4-La complicidad. Son algo más que unas simples compañeras. Son amigas. En la modalidad de dobles algo así ayuda mucho porque las permite apoyarse mutuamente en los momentos difíciles y superarlos. 5-El entorno. Es muy difícil, y creo que en España no se ha valorado nunca lo suficiente, contar con jugadoras de tanto nivel para la selección. Si el equipo ha ganado tantas veces la Copa Federación es porque Arantxa y Conchita han estado siempre dispuestas a acudir. Parece lógico, pero no es lo habitual en el tenis mundial. Esto ha vuelto a ocurrir con esta pareja.