París en el horizonte

EL TOUR DE FRANCIA finalizó el 25 de julio para todo el mundo menos para el US Postal. La sombra de Lance Armstrong es muy alargada y parece llegar a todo su equipo, no al grupo de elegidos que estuvo en el Tour. Sólo dos de los corredores que participaron en la prueba francesa, Víctor Hugo Peña se quedó a última fuera y su cuerpo lo ocupó Benjamín Noval, repiten en la Vuelta. A Bruyneel y sus corredores les dio lo mismo. Volaron por las calles de León a una media horaria de 54,049 kilómetros por hora, que es mucho rodar en el mes de septiembre. Hay que volver a decir que el US Postal hizo otra carrera, una frase que hubo que repetir muchas veces en Francia. Bruynel, el discípulo de Saiz, se le ha subido a la chepa a su antiguo director. Le debió de enseñar muy bien el oficio para brillar en la especialidad que marcó la trayectoria de la Once, bueno, una de ellas, y en la que fraguó muchos de sus éxitos. Queda por ver de lo que es capaz Floy Landis en esta Vuelta. Si comparamos los resultados de hace un año en Gijón con el resultado final que vimos en Madrid habría que decir que Landis, Vinokourov, Cadel Evans, Menchov, Mancebo, Valverde, Hamilton y Sevilla se van a jugar la Vuelta. Es cierto que después de 27,7 kilómetros es una temeridad descartar al resto de participantes, pero dentro de ese ramillete, del que incluso de podría prescindir de Sevilla y Evans, estará el ganador, para desgracia de un Roberto Heras que ha entrado con el pie izquierdo en el Liberty. Todos los corredores que le han sacado tiempo no se van a caer, salvo que veamos al Heras de sus mejores días. Todo es posible después de un día de carrera, y más en el mes de septiembre, en unos inicios normales para todo el mundo menos para el US Postal, que se salió, y para el Liberty, que se desfondó.