Europa propina un bofetón de órdago a USA en la Ryder

Si a Bernhard Langer, capitán del equipo europeo para la Copa Ryder, le hubiesen propuesto firmar una ventaja tras la primera jornada por 6,5-1,5 sobre su rival estadounidense en Oaklands Hill (Detroit), sin duda lo habría hecho sin mirar el papel. Europa, con ese inesperado margen, el mayor de los últimos 29 años tras la primera jornada, se ha descolgado antes de lo previsto de un rival desangelado y frío, plagado de estrellas incapaces, por el momento, de aglutinarse para plantar batalla al equipo capitaneado por el calculador Langer. El equipo estadounidense se ve abocado a la remontada. La atmósfera inicial de revancha ante 38.000 aficionados, se ha tornado en la necesidad de recuperar el terreno perdido, que aún queda pues en el aire están los 8 puntos de mañana, sábado, en otro jornada doble de «foursomes» y «fourballs», y las 12 de los individuales del domingo. Sin embargo, la competición se le ha colocado demasiado cuesta arriba a Estados Unidos, especialmente por tratarse del equipo anfitrión en un campo difícil, estrecho y con «greens» duros que, en teoría, beneficiaba más a los norteamericanos. El mayor desmán que echó abajo el proyecto de Hal Sutton, jefe de operaciones local, fue que su pareja de elevado impacto, formada por Tiger Woods y Phil Mickelson, naufragó sin remedio tanto por la mañana en los «fourballs», a manos de Montgomerie y Harrington por 2 y 1 (los estadounidenses tardaron 80 minutos en anotarse el primer hoyo), como por la tarde en los golpes alternos, con Clarke y Westwood como verdugos (por un hoyo). La caída de la primera ficha tuvo el efecto dominó y acabó por tumbar al resto. Europa se mostró intratable en la primera sesión matinal y acabó invicta (3,5 a 0,5), o lo que es lo mismo, tres victorias y un empate después de cuatro partidos. El mejor comienzo para el Viejo Continente desde que en 1979 entraron a formar parte también del equipo jugadores no británicos. Por la tarde, en golpes alternos, Sutton volvió a confiar en Woods y Mickelson, y éstos volvieron a fallar ante Clarke y Westwood. Además, cayeron de forma lastimosa.