POUSO, TÉCNICO DEL SESTAO
«Si esto le hubiera ocurrido a un jugador, el partido no habría seguido»
Tampoco el entrenador del Sestao River, Carlos Pouso, era capaz de abstraerse a los hechos vividos ayer en El Toralín. Cuando iniciaba su comparecencia en la rueda de prensa posterior al partido, dejaba entrever su perplejidad por el cariz que tomaron los acontecimientos: «ha sido una decisión del dúo arbitral que el partido se reanudara, nosotros estábamos dispuestos a suspenderlo, igual que la Ponferradina, pero ellos insistieron en que había que seguir jugando y no pusimos objecciones, y conste que esto no sirve como disculpa por lo que ocurrió más tarde, pero sí tengo muy claro que si esto le hubiera ocurrido a un jugador, el partido no se habría jugado». Algunas informaciones hablaban de que los auxiliares de Pérez Alleres, que eran Aira Enríquez y Alonso Maceira, recibieron una llamada de su Colegio en Vigo, instándoles a que siguieran con el partido. Cuando este medio de comunicación pudo acceder al vestuario arbitral a la conclusión del partido, ninguno de los compañeros de Pérez Alleres quiso abordar el tema, indicando que no era el momento. Estaba presente el colegiado local García Martínez, que acababa de pitar un partido en Dehesas cuando fue requerido para ir al Toralín.