Las modelos se defienden y no creen sexista su trabajo

Las protestas por parte de las organizaciones y federaciones de consumidores no afectan a las modelos que actúan como recogepelotas en el Masters Series de Madrid, que consideran que están cumpliendo su trabajo, nada sexista, y que incluso repetirán el próximo año si tienen oportunidad. «Todos los comentarios están fuera de lugar», señaló Marta Romero, de 23 años, una de las 25 modelos elegidas para actuar este año en el torneo madrileño. «Si hablamos de sexismo tendríamos que ir a la Pasarela Cibeles y a las demás exhibiciones de modelos. Para nosotras no hay nada de todo eso, simplemente es un trabajo más que además nos gusta y con el que estamos disfrutando». A las 25 elegidas no les afectan ni algunas insinuaciones que han recibido al saltar a la pista como, «Idos a las pasarelas», ni los que las silban por admiración. «Estamos acostumbradas a desfilar con cualquier tipo de ropa, y ésta que nos han puesto no es tampoco demasiado provocativa», señaló, «además nos entra por un oído y nos sale por otro. Es más, ahora todas queremos salir en cada partido; hemos probado, nos gusta y tenemos aún más ganas». Las modelos sólo actúan durante un partido al día, aunque coparán las semifinales y la final. Cobran entre 900 y 1.500 euros por esta semana, dependiendo de su contrato. La firma que patrocinan, Hugo Boss, ha sido denunciada por la Federación de Consumidores en Acción por entender que existe una «presentación sexista» y recordando que esta práctica vulnera la Ley General de Publicidad que «prohíbe la publicidad que atente contra la dignidad de la personas, especialmente en lo que se refiere a la infancia, la juventud y la mujer». Las chicas visten durante el único partido en el que actúan una camiseta negra sin mangas, y una falda blanca por debajo de la rodilla. Además, llevan un culotte tipo ciclista debajo. Perjuicio para Madrid 2012 Por su parte, la secretaria de Igualdad del PSOE, Maribel Montaño, también pidió la retirada de las novedosas recogepelotas. Izquierda Unida fue más allá en sus acusaciones y consideró que esta polémica perjudica a la candidatura madrileña para los Juegos Olímpicos de 2012. «Es un espectáculo inadecuado», aseveró la portavoz municipal de IU, Inés Sabanés. El equipo de gobierno madrileño optó por guardar silencio al considerar que es un asunto que depende de la organización del torneo.