De Celis no tendrá que saltar la tapia
Lo que va del ayer al hoy. Al menos eso es lo que debe pensar el presidente de la Cultural, Antonio García de Celis. La humildad del máximo dirigente culturalista le lleva a confesar vivencias de sus años de juventud, como por ejemplo las tretas ideadas para poder presenciar en directo un encuentro entre la Cultural y el Athletic de Bilbao. De Celis recuerda cómo tuvo que ver, en compañía de lo que denomina como «la cuadrilla», el partido que sirvió para estrenar La Puentecilla. «Como no podíamos entrar al campo debido a la gran cantidad de gente que se agolpaba en las puertas del estadio y era imposible acceder por las puertas, no nos quedó más remedio que saltar las tapias de La Puentecilla para poder presenciar el encuentro. Unos encima de otros, pudimos llegar hasta lo más alto de la pared y meternos en la grada. De chaval yo era una ardilla y al final logramos ver el partido desde una buena posición», señala emocionado.