Verdasco explota su regularidad en el juego para superar a Costa

El madrileño FernandoVerdasco fue el primer finalista del Master de León tras imponerse a Albert Costa por 6-7, 6-2 y 6-3. La regularidad en el servicio y un sólido juego desde el fondo de la pista dieron a Verdasco el triunfo ante el jugador catalán que a pesar de que comenzó ganando el primer set en un apurado tie break (7-4) acabó cediendo los dos siguientes de forma clara. Costa, ganador de la anterior edición de este torneo cuando se disputaba en Valladolid como Master de Castilla y León, no podrá repetir este año. El partido comenzó con una tremenda igualdad. Ni Costa ni Verdasco perdieron su servicio. Estaba claro que mientras los dos conservasen el saque, se llegaría a la muerte súbita como así ocurrió. La solidez en el saque, las voleas rápidas o los golpes ganadores desde el fondo marcaron este primer set. Los juegos se sucedían como cortados por un mismo patrón. Algo lógico, por otra parte, dada la enorme rapidez de la pista instalada en el Palacio de Deportes de León. Durante todo el encuentro, los intercambios de golpes fueron muy escasos, al contrario de lo que se vio en el partido siguiente entre Nadal y Sánchez. Lo normal era un saque y uno dos golpes más a lo sumo porque la celeridad con que corría la bola en la pista de color tierra batida era tremenda. Estaba claro que el partido sólo comenzaría a decantarse hacia uno u otro, cuando cualquiera de los dos decidiese meter un poco más de presión al contrario y arriesgase más en los golpes. Fue Verdasco, tal vez más interesado en ganar que Costa, el que puso proa decidida hacia el triunfo. Para ello empezó el segundo set de la mejor forma posible: rompiendo el servicio de Costa y anotándose el blanco el segundo juego. El leridano reaccinó e hizo a su vez dos juegos seguidos pero Verdasco no estaba dispuesto a permitirle ir más allá. Con muy buenos golpes se impuso por un claro 6-2 en menos de media hora. El primero había durado casi una hora. En el tercero Costa empezó conservando su saque de forma relativamente cómoda y empieza a conectar más golpes con su derecha, especialmente con su magnífico revés. El partido, no obstante, discurre por los cauces de la igualdad más estricta (3-3) y cuando parecía que iba a ser un calco del primero, el madrileño decidió que no. Rompió el servicio a Costa en un juego disputadísimo -ambos eran conscientes de que el partido se decidía ahí- y puso el 4-3 a favor en el marcador. Estaba hecho. Se anotó los dos siguientes, y set y partido en el bolsillo. Hoy disputará la semifinal con López.