Jareño plantea como retos ganar intensidad y recuperar a la gente

El entrenador de Baloncesto León, Ángel Jareño, explicó ayer que tras reflexionar durante el parón navideño regresa al trabajo con el equipo con un triple reto para las próximas jornadas. En su opinión, para que el equipo aparque su bajón del mes de diciembre «la receta es sencilla». Por una parte, existe la prioridad de «recuperar a la gente» y especialmente a Dani García y Pedro Rivero. Por otra, «conseguir que el equipo recupere la intensidad y el trabajo colectivo» que hicieron ganar a León nueve partidos de diez. Y por último, que «en esa intensidad se implique un jguador muy importante para el equipo como es Lamont Barnes». Sobre el pívot estadounidense, Jareño insistió en que su confianza en el jugador es total, por lo que intentará conseguir que puede hacer mucho más por el equipo porque «tiene calidad para ello». «No es cuestión de 32 minutos o de 25, lo importante es que lo que juegue tiene que hacerlo con una intensidad que nos permita hacernos mucho más grandes como equipo, porque es nuestra referencia por dentro», explicó el técnico. Jareño comentó que sobre la situación del equipo sí son posibles las lecturas positivas que a él le gustan: «Cuando hemos estado entre los mejores defensores de la liga hemos conseguido esa buena racha de nueve victorias en diez partidos, porque sólo perdimos en Fuenlabrada, y por contra en los últimos cinco encuentros hemos bajado mucho y hemos sufrido dos derrotas». Pero en ese tema, el entrenador planteó que está claro que en la LEB no hay margen de error: «Los de arriba han dejado claro que no fallan y nosotros no podemos fallar tantos. Lo importante es pensar en nosotros mismos, en cómo volver a nuestra intensidad defensiva y al juego colectivo». Y también aprovechó para plantear que en el deporte los resultados marcan en exceso las tendencias. «Si no hubiesemos perdido los dos últimos partidos en casa estaríamos hablando de una primera vuelta impresionante y por contra, como consecutiva de ello, sólo hablamos de bache». Y sobre ese bache, el técnico recordó que se produjeron una serie de coincidencias que dañaron al equipo, con la ausencia de Dani y el bajón de Pedro que estaba jugando a un nivel muy alto, con unos entrenamientos de menor calidad y con problemas, y todo ello en una pérdida de intensidad.