León estropea en el último cuarto una gran remontada (83-69)

El Baloncesto León volvió a la actividad para aproximarse de nuevo a su realidad competitiva después del paréntesis navideño. Con la única ausencia de Panadero y Martin Ferrer, el equipo leonés se tomó el envite con la seriedad que requería el primer partido del 2005. El equipo de Jareño demostró ayer lo mejor y lo peor de lo que es capaz. Comenzaron perdiendo, remontaron y cuando tenían el partido encarrilado, lo tiraron después de un último cuarto deplorable. El técnico leonés dio salida a su equipo más competitivo, incluyendo al canterano Méndez, que respondió a la confianza depositada en él con un partido notable, aunque Jeffers sería el más destacado. Una de las claves del partido fue la falta de acierto en los tiros libres de los leoneses (32%) y su poca fortuna en los rebotes, que casi siempre cayeron del lado de los gijoneses. Los jugadores de ambos equipos empezaron frios el partido y tras casi dos minutos en los que el electrónico seguía a cero, llegaron las primeras canastas favorables a los gijoneses. En la segunda jugada del partido hubo un gran susto tras una personal de Lledó sobre Jeffers obligó al americano a retirarse cojeando al banquillo. Finalmente, no fue nada grave y el jugador acabó siendo el mejor. Tras un arranque titubeante, el Farho se puso con nueve arriba (11/2), lo que obligó a Jareño a pedir un tiempo muerto. El desconcierto continuaba sobre la cancha, aunque León fue mejorando a raiz de su segunda y tercera canasta. La salida de Barragan, junto al acierto anotador de Jeffers, permitieron al León remontar y terminar el cuarto con una desventaja de tres puntos. En el segundo León que también se puso el mono. Las cosas se ponían de cara para los leoneses, que acaborn poniéndose por delante. La segunda parte arrancó con una guerra de triples. Jeffers y Pacreu inauguraron el concurso y dieron paso a un cuarto muy dinámico. El marcador se mantuvo ajustado hasta el término del cuarto. En el último las cosas se pusieron feas para los gijoneses en el primer minuto, cuando Young hizo su cuarta falta personal. A continuación llegó el primer punto de los de Jareño para poner el 60/64 y en la jugada posterior un gran tapón de Higgins a Waleskowski puso el final al juego de los de León, que estuvieron después seis minutos sin anotar. Los de Jareño no supieron reorganizarse ni en ataque ni en defensa y acabaron claudicando ante un rival más entero y acertado.