El Ademar se pasea por la cancha del Alcobendas con su cantera
Cadenas no tuvo problemas para solventar el amistoso a pesar de las numerosas ausencias
El Ademar se impuso con rotundidad en el amistoso disputado ante el BM Alcobendas, que los leoneses manejaron a su antojo. El conjunto de Cadenas propuso durante los primeros minutos un intercambio de goles con su rival y, a partir del minuto 20, hizo valer su mayor capacidad ofensiva para dejar sin opciones de victoria a los madrileños. Rafa Guijosa hizo jugar a toda su plantilla, algo que no hizo el técnico visitante, con excepción de los balcánicos Saric y Radjenovic, y su equipo demostró que va a tener que trabajar mucho en el segundo tramo de la temporada para alcanzar el sueño de la permanencia. El Ademar se presentó con numerosas bajas. A los internacionales convocados por sus distintas selecciones se unían los lesionados Colón, Yeray, Castresana y Víctor, por lo que Cadenas echó mano de la cantera. El partido tuvo las características propias de un amistoso. Los jugadores saltaron relajados y las defensas permitieron más movimientos de lo habitual, algo que provocaba el enfado de los porteros y de los técnicos. Igualmente benévolos fueron los colegiados, que dejaron obrar a los jugadores con impunidad. Ambos equipos optaron, pues, por el espectáculo y la igualdad predominó durante el primer cuarto de partido, al que se llegó ya con el elocuente marcador de 9-9. Fue en ese punto cuando los leoneses decidieron incrementar su ritmo y, poco a poco, logaron distanciarse en el marcador, aprovechando los numerosos fallos de los alcobedenses en ataque, donde mostraron una alarmante falta de ideas a poco que la defensa blanca subió en intensidad. Rafa Guijosa era el que más en serio se lo tomaba y se desesperaba viendo como los suyos eran incapaces de abrir la zaga visitante, que alternaba su habitual 6-0 con un 5-1 presionante en algunas fases del choque. Tras el descanso, los madrileños protagonizaron un amago de reacción con dos goles consecutivos en sendos contragolpes de su extremo zurdo, Ángel Castaño. . Sin embargo, un tanto de Javier Callejo, también en transición, decantó de nuevo el partido del lado foráneo, ya que después llegaron otros cinco de forma consecutiva que elevaron la renta hasta los diez goles (17-27, min 33). El Alcobendas pareció rendirse y fue incapaz de reducir la renta más allá de los nueve goles, por lo que aún creció hasta superar la decena.