Diario de León

El Atlético reencuentra la victoria y Torres el gol, aunque sea de penalti

Ibagaza celebra el segundo gol que consiguió el Atlético anoche

Ibagaza celebra el segundo gol que consiguió el Atlético anoche

Publicado por
Amador Gómez - madrid
León

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El Atlético y Fernando Torres rompieron su mala racha ante un cómodo rival que se adelantó muy pronto en el marcador y sufrió la sorprendente efectividad de los rojiblancos en la primera parte. Después de cuatro partidos sin conocer la victoria, el Atlético volvió a ganar, aunque no a convencer, y el Niño a marcar tras dos meses de sequía, pero fue de penalti y antes de malograr inmejorables ocasiones en el segundo tiempo. Los goles de la remontada llegaron con el peor juego rojiblanco, y sin embargo, cuando el Atlético mejoró y arrolló al Albacete en la segunda parte, a Torres y sus compañeros les falló el remate. Al contrario que en la segunda mitad, el Atlético obtuvo en la primera parte un premio excesivo a su juego insulso, sacando el máximo rendimiento a sus escasas ocasiones en ese periodo, ya que dispuso de cuatro y logró tres goles, y el que valió el empate, porque un penalti que no fue. El único tanto rojiblanco de jugada fue el segundo, gracias a una galopada de quien fue de nuevo el mejor jugador del Atlético, Gronkjaer, que se la puso a Ibagaza para que el argentino rematase tras un error defensivo del Albacete. Sólo tardó 25 minutos el Atlético en dar la vuelta a un partido que se le puso cuesta arriba con el impresionante gol de Francisco, quien se marchó de Luccin desde su área sin que el francés se atreviese a entrarle para no llevarse la amarilla. Nada más cruzar el círculo central Francisco vio a Leo Franco adelantado y la clavó. No tuvo mucho más en ataque el Albacete, y el Atlético, con el balón en su poder, y jugando siempre en campo visitante, fue machacando a los manchegos, aun jugando al tran-tran y sin destellos, salvo los de Gronkjaer e Ibagaza. Tras el descanso, sin embargo, la mejoría de su fútbol, el nuevo ritmo y el continuo acoso rojiblanco no se tradujo en más goles.

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