Víctima del infierno verde (1-0)

El Sevilla perdió ayer en el «infierno verde» del estadio Apostolos Nikolaidis de Atenas ante el Panathinaikos (1-0), en un partido que podía haber sido peor si no es por la buen actuación del meta Esteban. De entrada, Joaquín Caparrós puso en liza un once sorpresivo, en el que figuraba un trivote en el centro del campo, con Jordi López, Renato y Martí para frenar a la línea de creatividad del Panathinaikos, que, sin embargo, salió con tres centrales y dos carrileros. La tónica del partido quedó clara al mediarse la primera parte, porque el Sevilla, que volcaba su juego demasiado hacia la izquierda, llegaba sin peligro al área rival y el Panathinaikos parecía cada vez más próximo a inaugurar el marcador. Por esto, no fue extraño que en el minuto 35 Gekas y Esteban se confirmaran como la «pareja de hecho» de la noche ateniense, ya que el meta le hizo un verdadero paradón en dos tiempos al atacante heleno y, luego, un defensa tuvo que sacar la pelota bajo palos. El Sevilla logró llegar indemne al descanso, aunque era evidente que no funcionaba y Alves se tenía que multiplicar, para tapar las vías de agua que creaban los griegos atrás. Por eso Fernando Sales salió en la segunda parte en lugar de Jordi López y recobraban su dibujo habitual. El cambio le dio más empaque a los de Caparrós, a lo que se sumó la lesión del defensa Goumas, que había sido uno de los jugadores más destacados del Panathinaikos. La segunda parte pasó a tener un claro color sevillista, pero cuando mejor jugaban los españoles el lateral Vintras se sacó de la manga un derechazo que se coló por la escuadra sin que Esteban pudiera hacer nada por evitarlo. Incluso con ese golpe en contra el Sevilla estuvo a punto de empatar en varias oportunidades, incluido otro presunto penalti sobre Baptista no pitado, en unos movidísimos minutos finales que también pudieron significar el 2-0 para el Panathinaikos. Pero el marcador no se volvería ya a mover y, ahora, toca levantar el resultado, dentro de siete días, en el Sánchez Pizjuán. El Athletic se la jugará en 4 días El partido de ida entre el Austria de Viena y el Athletic Club, suspendido debido al mal estado del estadio Ernst Happel, se disputará el próximo jueves 24 en Viena. La vuelta se jugará el domingo 27, en San Mamés. Ese día estaba previsto el encuentro de Liga ante Getafe, que queda aplazado, toda vez que el club madrileño ha mostrado su absoluta disposición a colaborar con el club bilbaino. Se maneja la fecha del 23 de marzo como posible fecha de celebración de ese encuentro.