La Federación cierra el expediente a Aragonés con tres mil euros de multa

El Comité de Competición de la Federación Española de Fútbol cerró ayer con 3.000 euros de multa a Luis Aragonés el expediente disciplinario que abrió en diciembre pasado al seleccionador nacional, a instancias de la Comisión Antiviolencia, por sus polémicas manifestaciones vinculadas con el racismo. Como se esperaba, el organismo no se mostró duro aplicó una simple sanción económica, sin añadir la inhabilitación, suspensión o privación de licencia que reclamaban los sectores más críticos con el «sabio de Hortaleza» tras referirse de forma despectiva al pasado colonial de Gran Bretaña. Una vez tratado «de forma pormenorizada» el expediente, Competición aseguró que más que de expresiones xenófobas o racistas cabe hablar de «imprudencias que atentan contra la dignidad o decoro deportivos». Como atenuante se ha tenido en cuenta, además, que las palabras de Luis sobre Henry fueron proferidas durante un entrenamiento, ámbito que debería ser privado. No así las declaraciones contra los británicos, ya que tuvieron lugar en la rueda de prensa previa al choque entre España e Inglaterra, jugado el 17 de noviembre en el Santiago Bernabéu. En consecuencia, Competición aplicó a Luis por una infracción grave de los Estatutos de la FEF. Le aplicó la máxima multa posible para estos casos, ya que la sanción puede oscilar entre 600 y 3.000 euros, pero evitó suspenderle por un período de entre un mes a dos años, condena también recogida en la reglamentación para infracciones de este tipo. Luis Aragonés, que dispone ahora de diez días para recurrir ante Apelación, acatará la sanción puesto que ya había avanzado que sólo llegaría hasta las últimas instancias si se le acusaba abiertamente de racista.