El Promesas mete la quinta marcha y pone rumbo hacia el ascenso

El Promesas no falla. Aunque ante la Segoviana el equipo encajó por vez primera dos goles en un partido esta temporada y sufrió más de lo esperado por un exceso de confianza cuando lo tenía todo a su favor, lo cierto es que suma una jornada más sin perder, y ya van quince, recupera el liderato del grupo en solitario, aleja a uno de sus más directos rivales en la lucha por la primera plaza y sitúa a nueve puntos al Real Ávila, quinto clasificado y su próximo rival el domingo, a partir de las 17.00 horas, en el estadio Adolfo Suárez de la capital abulense. Además, mejora ostensiblemente sus números. Se mantiene como el equipo menos goleado del grupo, pero ya es el segundo más realizador, aunque empatado con Segoviana y Numancia B, y sólo superado por el Real Ávila con un gol más a su favor. Todo ello hace que sea un valor seguro y que empiece a cotizar al alza. Ganar en tierras castellanas será el espaldarazo definitivo para presentar sus credenciales a la primera posición del grupo para evitar en el sorteo a los otros campeones, en estos momentos Lugo, Real Oviedo y Las Rozas, todos ellos claros aspirantes al ascenso. El Huracán, a pesar de sus bajas, encadenó por vez primera esta temporada su tercera victoria consecutiva, lo que le lleva a la décima posición del grupo, además de asegurar prácticamente la permanencia, su primer objetivo. El próximo sábado visita al Íscar, un rival muy complicado en su feudo, pero ante el que el club trepalense debe confirmar su trayectoria al alza y sumar tres nuevos puntos que le permitan conectar con la zona alta de la tabla y acercarse a posiciones más acordes con su potencial real y sus verdaderas posibilidades. La aportación de Valderrey está siendo el revulsivo que necesitaba para optar a cotas mayores. La Hullera está entrando en una línea plana. La falta de continuidad y la de un escenario para poder entrenar comienza a pasar una excesiva factura al conjunto de Ciñera. Ante el Almazán, en el Área Deportiva de Puente Castro, se vio la falta de ritmo y de fondo físico que tiene el equipo por todas estas circunstancias adversas, lo que está provocando que una brillante temporada se quede en una campaña más por culpa de la adversa meteorología. La Cultural B también se encuentra perdida. Los acontecimientos vividos en el equipo matriz están dejándose notar más de la cuenta en el filial. Tres técnicos en apenas cuatro jornadas son demasiado lastre para cualquier equipo. La Bañeza no tiene suerte. A la cortedad de su plantilla se une una plaga de lesiones que puede causarle un daño irreparable. De no mediar una reacción inmediata, el descenso puede llamar a su puerta. «El error nuestro en la segunda mitad fue el de meternos atrás» MANUEL TOMÉ PORTELA Entrenador del Promesas Ponferrada