La Vuelta a Aragón recupera este año la cronoescalada tras siete años

La XLII Vuelta Ciclista a Aragón, que se disputará del 13 al 17 de abril, recuperará la contrarreloj individual en su modalidad más exigente, la cronoescalada, después de siete ediciones consecutivas sin incluirla en sus recorridos. Desde que en 1997, en la XXXIV edición, se disputó un segundo sector en la cuarta etapa con salida y llegada en Monzón, en el que se impuso el guipuzcoano Aitor Garmendia y que terminó siendo el vencedor final, los responsables del Club Ciclista Iberia, entidad organizadora junto a Unipublic, no habían vuelto a incluir una etapa cronometrada. La ascensión al inédito alto del Santuario de la Virgen de Herrera en la penúltima jornada deberá convertirse en el juez de la carrera aragonesa. El único precedente de una cronoescalada en la Vuelta a Aragón se produjo en la edición de 1990 en la etapa Tarazona-Agramonte, que se desarrolló sobre un duro y exigente trazado en el que se impuso el vizcaíno Iñaki Gastón.