Más pitos que aplausos enlagrada

La afición del Real Madrid dictó sentencia en el Santiago Bernabéu y lo hizo con indiferencia y con muchos más pitos que aplausos. El club impulsó el apoyo a los futbolistas con frases en las que se destacaba la importancia de la unión entre todos los estamentos pese al mal momento. Minutos antes de dar comienzo el encuentro, los vídeo marcadores mostraron imágenes de los jugadores del Real Madrid celebrando varios títulos. Cuando llegó el turno de los futbolistas del Real Madrid hubo división de opiniones, con más pitos, aunque en cuanto comenzó el partido el silencio se hizo notar como hacía tiempo que no se vivía en el Bernabéu. La primera pitada a los jugadores del equipo blanco, una vez que el balón se puso en juego, llegó a los 18 minutos. Justo cuando Luis Figo perdió un balón en la banda ante el acoso de un futbolista del Málaga. Sin embargo, en el minuto 33 llegó la primera gran pitada de la tarde. Tras unos minutos en los que los seguidores, disgustados con el juego del equipo, presenciaban casi en silencio el partido, David Beckham perdió un balón cerca del área contraria y la afición estalló, aunque el enfadó pareció durarle poco ya que apenas daba muestra de interés ante lo que sucedía en el terreno de juego. Con el gol se escucharon los primeros aplausos de la noche. La afición también demostró tener memoria con lo realizado por Raúl durante las diez temporadas que lleva en el primer equipo y le brindó una ovación, aunque también acompañada por críticas. Sin duda, no fue un día donde la unanimidad presidió el Bernabéu.