Gacelas en todoterreno
Mathilde Biscay y Emmanuelle Chesnoy, dos francesas afincadas en Madrid, forman el primer equipo español en el único rally raid del mundo sólo para mujeres
![Las dos aventureras posan sobre el capó del Mitsubishi con el que correrán el rally](https://imagenes.diariodeleon.es/files/image_large/uploads/2024/01/20/65ab1929739ca.jpeg)
Las dos aventureras posan sobre el capó del Mitsubishi con el que correrán el rally
Dominique Serra tenía un sueño. Imaginó una prueba para reivindicar el papel de la mujer y en el que sólo participaran ellas. Creó el Rally de las Gacelas hace quince años. Pero por la cabeza le rondaba darle algo más a la competición; no sólo la peculiaridad femenina. Por eso, pensó que sería necesario diferenciarse de las demás carreras de esta modalidad, como el Dakar. Y si no se puede luchar en cuanto a popularidad, sí en ingenio. Serra decidió darle un cariz mucho más aventurero, premiando la navegación de la pareja, y eliminó todo tipo de tecnología. Un compás, una brújula y un mapa de la década de los 60 son los únicos instrumentos con los que cuentan las participantes. Con esos elementos, Mathilde Biscay y Emmanuelle Chesnoy, dos francesas afincadas en Madrid, afrontan su primer Rally de las Gacelas, llamado así porque en Marruecos los hombres llaman con el nombre de este antílope a sus mujeres. Las dos trabajan en una editorial y el mundo del motor no les había atraído especialmente, aunque la alta competición no es extraña para ninguna de ellas. Manu fue tenista y campeona de Brasil. Mathi, por su parte, practicó el atletismo y el esquí. Ambas lo dejaron, por no tener el nivel necesario para mantenerse en la elite, pero les volvió a picar el gusanillo en septiembre. «Nos hemos inscrito por entusiasmo, que es el motor de la vida», comenta Mathilde. El primer objetivo de todos, no obstante, es volver sanas y salvas a Madrid». Siguieron diferentes caminos, hasta que se conocieron hace cinco años. Además de congeniar desde un principio, las dos comparten una curiosa característica: han tenido cuatro hijos. «Un poco sorprendente sí que es», indican las dos, que ven de diferente manera cómo van a soportar diez días (el rally se disputa entre el 20 y el 30 de abril) sin tener noticias de sus retoños. La organización prohíbe cualquier comunicación con el exterior. Para Emmanuelle, que ejercerá de copiloto y navegadora, no resulta ningún problema. «No puedo hacer nada desde el desierto. Seguro que están bien», comenta. Mathilde, la piloto, se apunta al discurso de su compañera, aunque claudica al final: «Estaré más angustiada que ella». «Pero tenemos que estar completamente concentradas en lo que hacemos y no nos podemos despistar», le contesta su compañera.