La historia y la polémica marcan la otra semifinal del torneo copero

El Betis y el Athletic se enfrentan mañana jueves en la otra semifinal, marcada por la historia y la polémica. En el apartado nostálgico se encuentra la final de 1977, la primera con la actual denominación que los dos equipos disputaron en el Vicente Calderón. Se tiraron 20 penaltis, aunque en la retina de los aficionados queda sólo uno, el que Esnaola le paró a Iribar. Veintiocho años después, la portería es un foco de dudas en los dos conjuntos. En Bilbao, Ernesto Valverde se debate entre continuar con el portero de la Copa (Iñaki Lafuente) o dejar que el cancerbero que salte al estadio Ruiz de Lopera sea el riojano Dani Aranzubía. En Sevilla, la situación es más rocambolesca. El joven Toni Doblas, que en verano estaba en la lista de transferibles del club, se ha hecho el dueño de la portería en detrimento de Prats y Contreras. Ahora parece que los veteranos tendrán su oportunidad para intentar llevar a los béticos a la Copa de Europa como en el curso 2002-03.