Betis y Athletic dejan todo en el aire para San Mamés (0-0)

El Athletic dejó escapar una oportunidad de oro para poder sentenciar la eliminatoria en el partido de ida. Los leones desperdiciaron numerosas ocasiones de gol por su ineficacia o por la actuación de Toni Doblas, que estuvo brillante durante todo el encuentro. El Betis sólo despertó en la segunda parte y en los minutos de la basura. El Athletic demostró desde un principio que estaba metido en el partido. Hace ya 21 años que el rey de copas no se alza con su trofeo y eso es mucho tiempo para un club histórico como éste. No dejó en ningún momento que el Betis desplegara su juego, sabedor de lo que se jugaba. El Athletic quería llegar con un marcador cómodo a San Mamés. Los leones se quedaban con el balón con muchísima facilidad, lo que impedía a los sevillanos unir una sola jugada. Denilson y Joaquín sólo consiguieron en una ocasión cada uno centrar en condiciones desde la línea de fondo. Todo por la presión que ejerció el Athletic. Ernesto Valverde había estudiado perfectamente a su rival. Las ayudas eran constantes; y la colocación del cachorro Llorente como ariete causo muchos problemas a Juanito y Rivas. El riojano ataba a los centrales, lo que permitía a Tiko a Yeste disponer de verdaderas autopistas para encarar la portería de Doblas. El navarro y el vizcaíno se movían con total facilidad y distribuían el balón hacia las bandas con total impunidad, buscando la velocidad de las alas. Pero el buen fútbol bilbaíno no encontró portería por culpa de Toni Doblas. El portero surgido de la cantera verdiblanca, que en verano tenía colgado del cuello el cartel de transferible, se ha hecho con el mando en la portería sevillana por delante de los veteranos Contreras y Prats. Doblas realizó una magistral actuación, con movimientos más propios de un portero de balonmano que de uno de fútbol, como el canterano que le sacó con la pierna doblada a Yeste. Mientras él paraba, sus compañeros apostaban por el balón en largo, algo que agradecieron los centrales ocasionales (Gurpegui y Lacruz) del Athetic. La ineficacia de ambos equipos obligó a que todo quede pendiente para la vuelta.