La ACB se desmarca de la polémica sobre los matrimonios de conveniencia

La ACB no intervendrá en la última polémica que sacude el baloncesto español: los matrimonios de conveniencia. Los dirigentes de la Liga determinaron este martes que lo único que van a hacer es cumplir la ley sobre la cuestión de los asimilados, esos jugadores que adquieren la condición de nacionales tras casarse con una española. Por lo tanto, no se va a poner ninguna traba a que los siete profesionales (por el momento) que han cambiado de condición durante la temporada, vayan a ver dificultada su participación en lo que queda de competición. Todos ellos han cumplimentado los requisitos que marca el Real Decreto 178/2003. Es decir, la presentación del permiso de residencia, de trabajo y, obviamente, el certificado de matrimonio. Según fuentes de la ACB, si los jugadores tienen en regla todos estos parámetros, podrán jugar sin problemas, ya que no compete a la Liga juzgar si los matrimonios son por amor o por conveniencia. En total, unos 25 jugadores de todas las categorías (ACB, LEB, LEB-2 y EBA) se han beneficiado del matrimonio con una española. En la máxima categoría del baloncesto español, son siete los profesionales que en la actual temporada están jugado con la condición de asimilados: Omar Quintero (Forum Valladolid), Venson Hamilton (Joventut), Tyron McDaniel (Unelco Tenerife), Predrag Savovic (Lagun Aro Bilbao), Bobby Martin (Unicaja), Devin Davis (Barcelona) y Sitapha Savané (Gran Canaria). Todavía está a la espera de darse de alta en esta condición Dimitri Flis, el jugador ruso de la Penya que hace escasas semanas pasó por el altar con una catalana. El matrimonio que ejerció como espoleta para esta bomba en la canasta fue el de McDaniel. El americano encontró el amor vía internet y se casó en semanas.