Diario de León

Ribeiro gana en Astorga en un día no muy propicio para los leoneses

El luso se impuso al esprint y es líder, Pascual entró noveno y Gomes tuvo problemas La etapa de hoy«Lo tengo claro, Pascual sigue si

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O. Marrón - astorga
León

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La primera etapa de la Vuelta a Castilla y León, con inicio y final en Astorga, no sirvió para que los ciclistas leoneses brillaran. Aunque mantienen intactas sus opciones de cara a las siguientes cuatro etapas. Ayer, en la meta de la avenida de las murallas, se impuso al esprint el portugués Sergio Ribeiro (Barbot), por delante de Alexei Markov (Kauiku) y de David Fernández (Andalucía-Paul Versan. Javier Pascual, que parte como favorito y con el dorsal 1 de la carrera y del Comunidad Valenciana, fue noveno con el mismo tiempo del vencedor. «Esperaba que se moviera un poquito más la gente, pero al final han modificado y puesto una vuelta de unos cuarenta kilómetros después del puerto y la gente que tenía esprinters ha cerrado bastante la carrera y al final y hemos llegado al esprint», resumía el corredor de la Virgen del Camino. Pascual llegó con cierto enfado y contrariado a la meta, en cuyo podio fue aclamado como el mejor castellano y leonés clasificado. Porque además del cambio en la etapa que inicialmente iba a acabar nada más bajar el puerto de Foncebadón, «al final había un repecho» favorable a sus características de potencia, «pero y antes una curva en la que no me pude colocar muy bien y he hecho sólo noveno». El leonés pretendía brillar ante su público, en su tierra, en cuyo podio aunque no como ganador fue aclamado más que nadie y tras el que no paró de firmar autógrafos. El estado de forma y de gracia en el que llega le hacían sentirse obligado a ganar ayer y no lo consiguió. El lacianiego Víctor Gomes está clasificado en el puesto en un intrascendente puesto 64, dado que entró en el mismo tiempo que el ganador. Sí Pascual estaba enfadado porque no pudo llegar bien colocado a la recta de meta tras la última curva para disputar la etapa, al de Villager de Laciana en el Andalucía-Paul Versán, un problema mecánico mermó las posibilidades de intentar brillar en la parte final. El cambio no funcionó bien y se le atascó en la subida a Foncebadón, haciendo que quedara descolgado. «Luego cazé al pelotón tras la bajada, pero ya no tenía oportunidades. Antes del puesto y después el Comunidad Valenciana llevó la carrera muy controlada además», resumía. Sobre el mejor horario La carrera discurrió rapidísima, sobre el mejor horario previsto por la organización para los 142 kilómetros de la etapa que concluyó ante el Palacio de Gaudí. Después de numerosas escaramuzas en los primeros kilómetros del recorrido, tras superar la cota de segunda categoría del puerto del Manzanal -que coronó primero Alexis Rodríguez (Barbot), ganador el año pasado la carrera de Robledo de la Valdoncina-, no se hicieron esperar los ataques serios. El primero, de José López (Kaiku) y Oscar Laguna (Relax Fuenlabrada), que llegaron a disponer de ventajas cercanas a los tres minutos y que pasaron por delante del pelotón, a 2,20, por Ponferrada. Sin embargo, antes del Alto de Foncebadón, de primera categoría, se les unieron varios corredores más y fueron cazados luego por el grupo, que lideraba el Comunidad Valenciana. No obstante, el salmantino Alexis Rodríguez logró saltar antes de la cumbre para pasar primero y asegurar el maillot rojo de líder de la montaña. El pelotón pasó cortado en grupos por esta cota, y en la bajada se formó un amplio grupo de unas treinta unidades, que posteriormente se fue ampliando en más corredores, con ataques sin demasiada suerte, salvo el protagonizado por Enrique Salgueiro (Spiuk) y Jorge Azanza en el kilómetro 113 que llegaron a tener medio minuto. La última curva, determinante Pero ya encarando los últimos kilómetros el ritmo del pelotón abortó las escapadas y obligó a una llegada masiva, impulsada por equipos con esprinters. Pascual iba bien colocado hasta la última curva, tras la que estaba la recta en cuesta, un lugar más o menos apropiado para sus característica. Pero salió mal colocado y Ribeiro fue el más rápido e inteligente para aprovecharse de la circunstancia y de la vigilancia sobre el leonés. El luso confesó tras pasar la línea de meta que para él ha sido una sorpresa este premio, puesto que ha llegado para trabajar para el equipo. Aunque sí reconoció que viene de ganar una carrera en Portugal: «Me encuentro muy bien, y hoy el equipo apostó bastante por mí pude ganar». No piensa en la general, porque vino a Castilla y León «para ayudar a Alex Rodríguez -el salmantino que ayer se llevó el premio de la montaña y el maillot rojo- y Klaus Moller para la general: sólo gané hoy y está bien». El tercer clasificado, David Fernández (compañero de Gomes, que ya lo daba como baza un día antes), reconoció que la etapa fue lo previsto: «Ha sido muy dura, el Comunidad Valenciana está muy fuerte y desde salida lo ha intentando arrancando y atacando en todo momento para llevar gente adelante en el puerto de primera». El control sobre ellos del resto lo impidió, pero hizo la carrera endiablada. «A pesar de las molestias en el estómago, en la meta he consegido ser rápido y hacer tercero», resaltó.

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