Arnold Palmer llega de incógnito a León por motivos profesionales

Celoso de su intimidad, uno de los hitos del golf mundial, Arnold Palmer, no se dejó ver en su visita a León. Vino por motivos profesionales y pasó en la ciudad poco más de un día. Aterrizó su jet privado en el aeropuerto de la Virgen del Camino, junto a su mujer y una nieta, y se alojó en el Hostal San Marcos la mítica figura del golf mundial que, a sus 74 años disputó el pasado año su Masters número 50, en Augusta. Palmer, que actualmente se dedica al diseño y gestión de campos de golf, ha participado en más un millar de ocasiones en el circuito estadounidense. En su poder cuenta con siete títulos del Gran Slam -cuatro Masters, un U.S. Open y dos Abiertos británicos- y 62 torneos de la PGA. Es considerado uno de los golfistas más carismáticos de la historia. Muy querido por la afición, fue considerado el promotor de trasladar el golf desde las altas esferas de la sociedad hasta convertirse en un espectáculo de masas, y es conocido familiarmente con el apodo de «El Rey». Aunque ya jubilado, Arnold Palmer sigue vinculado directamente al golf, y también sigue siendo uno de los deportistas que más ingresos anuales recibe en todo el mundo, debido a sus apariciones publicitarias en diversas campañas y a las empresas que controla, de gestión y explotación de campos de golf por todo el mundo y de ropa deportiva. Una prueba más del control que tiene sobre el golf mundial es la el canal temático The Golf Channel que también dirige.