El gol de Valdo en la ida coloca a Osasuna en su primera final Guardiola seguirá luchando por su inocencia tras ser condenado a siete meses de prisión

Osasuna, de la mano del técnico mexicano Javier Aguirre, alcanzó la primera final de Copa de su historia, impulsado por la impotencia de un Atlético incapaz, no sólo de marcar gol alguno, sino de crear peligro con asiduidad o, al menos, de convencer de su garra a una afición que le despidió con una gran bronca, convencida de que ha echado el cierre a otra lamentable temporada. El conjunto pamplonica pudo festejar en el Vicente Calderón su primer pase a una final de la Copa del Rey, la que disputará el próximo 11 de junio contra el Betis, gracias al único gol marcado por el leonés Valdo en el partido de ida en Pamplona. El futbolista Josep Guardiola, condenado por un Tribunal italiano a siete meses de prisión por consumo de nandrolona, continuará, tras el fallo, su particular «cruzada» por demostrar su inocencia. Guardiola ha sido condenado por el Tribunal de Brescia a siete meses de prisión y 2.000 euros de multa por dopaje, que no obstante no cumplirá al no tener antecedentes penales. El caso del positivo del ex barcelonista se remonta al 2002, cuando jugaba en el Brescia y dio positivo en dos controles antidopaje. Tras desvincularse en 2001 del Barcelona, donde militó 17 años, fichó por el Brescia, de la Primera División italiana, con el que debutó el 12 de octubre. Allí demostró sus cualidades en el centro del campo, pero el 22 de noviembre saltó la alarma al dar positivo por uso de nandrolona, un esteroide anabolizante utilizado para aumentar la masa muscular de los deportistas.