Joven, con talento y hambre de títulos

Ha sido su año. El camerunés se convirtió desde el pasado verano en la estrella de la temporada. Protagonizó el culebrón de los fichajes y llegó al Barça como la gran incorporación después de que el club desembolsará algo más de 22 millones de euros. Eto'o ha ejemplificado el prototipo básico de futbolista azulgrana: joven, sacrificado, con talento y con mucha hambre de títulos. Ha estado «enchufado» a la temporada desde el primer momento, evitando incluso cambios o rotaciones por su afán de ganar partidos y golear. Ha tenido pocas sequías, lo que le ha permitido superar sus marcas anotadoras (14 goles en la temporada 2002-03 y 17 en la 03-04). Su regularidad ha sido determinante. Con la confianza de Rijkaard ha sido el materializador de las jugadas de sus compañeros y el referente para la afición tras el bajón de Ronaldinho. Su alarde de barcelonismo en la celebración del título de Liga fue el lunar en su gran año. Y sólo tiene 24 años.