«León y la Cultural, mis medicinas»

Manuel Rodríguez ejerció de presidente de la Cultural y Deportiva Leonesa en la década de los ochenta, los que van desde 1984 a 1988. Fue el impulsor de muchas novedades en el fútbol leonés. Después de casi veinte años, ahora vive apartado de la que fue la mayor pasión de su vida, el fútbol, aunque no olvida aquellos años y cuenta sus vivencias con una emoción que no puede contener. -¿A qué se dedica en la actualidad Manuel Rodríguez? -Estoy trabajando en Madrid en el grupo Elecnor, una multinacional que está extendida en 22 países. A vueltas con el gas natural y ajeno al mundo del fútbol. -¿Cómo se lleva la vida sin el fútbol? -Sigo como un aficionado más el mundo del fútbol, pero no he olvidado ni olvidaré jamás los años como presidente de la Cultural, los años en la Federación y las vicisitudes que me tocó vivir en el fútbol. -¿Qué diferencias ve entre la Cultural de sus años como presidente y la de ahora? -La semana pasada estuve en León y coincidí con el presidente Antonio García de Celis. La verdad es que el club tiene ahora una estructura organizativa de Primera División, pero la realidad es que está en Segunda B. Un estadio extraordinario, pero el club sigue estancado en Segunda B. -Parece que se queda a medias, a juzgar por su tono de voz... -La verdad es que no me gusta criticar a nadie que se ponga al frente de la Cultural, porque es un club que llevo muy dentro de mi corazón. Sé que Antonio (por De Celis) es un buen hombre y que su intención es dar lo máximo por la Cultural, pero bajo mi punto de vista creo que los gastos son demasiados para una categoría como la Segunda División B. A un equipo de fútbol hay que darle según lo que genere. La afición responde mínimamente para un estadio tan amplio. Si la respuesta es para estar en Segunda B, pues habrá que hacer un presupuesto en consonancia a la categoría, porque de lo contrario se pierde mucho dinero. No hay que supeditar el equipo a grandes sueldos y no estar siempre pendiente de las ayudas del Ayuntamiento. -¿Si usted hubiera contado con estos medios, se atreve a asegurar que habría ascendido a la Cultural? -El fútbol no son matemáticas. Tal vez es el deporte en el que menos fuerza tienen las matemáticas, porque cada vez hay mayor igualdad con independencia de los presupuestos. -¿Qué hizo para mantener a la Cultural sin excesivas deudas y con algunos jugadores importantes en la plantilla? -Había que hilar muy fino para aprovechar al máximo todos los medios. Fui el primer presidente de un club de fútbol de España que llevó espectáculos a los campos de fútbol. Me gustó integrarme en otras facetas al margen del fútbol que beneficiaran al fútbol. -¿Qué le hizo irse de León, tras dejar el mundo del fútbol? -Abrirme nuevos horizontes en la vida. He sido siempre un hombre que ha querido conocer otras experiencias. Nunca me ha gustado quedarme anclado en aspectos vanos. -Pero esas ambiciones personales le han pasado factura en su estado de salud -La verdad es que sufrí un problema grave de salud cuando me encontraba en Almería. Las ganas de vivir y León me dieron las fuerzas necesarias para salir hacia adelante. -¿León es su medicina? -León y la Cultural. He pedido que cuando muera me pongan una bandera de la Cultural encima. Ya se lo he hecho llegar a De Celis.