Bornes sufrió un pinchazo en el abductor y podría quedar fuera
Antes del percance, la noticia era la ausencia de Miguel García en el presunto equipo titular Visnjic se olvida del partidillo y dedica la sesión a afinar la puntería
El defensa central de la Ponferradina, Joaquín Bornes, se vio obligado a abandonar el partidillo de entrenamiento que se estaba celebrando en El Toralín. Durante una acción del juego, el de Los Palacios se echó mano al abductor izquierdo con claros síntomas de dolor. A renglón seguido se agachó para realizar un estiramiento de la pierna izquierda pero de inmediato se levantó para salir del campo con la mano en la zona afectada. Tomé detuvo el entrenamiento de inmediato para interesarse por el estado del defensa y después ordenó la reanudación del juego. Bornes se trasladó a ver al doctor Álvaro Gómez en un primer momento. Por lo visto, el galeno le tranquilizó tras una exploración, afirmando que no apreciaba ninguna rotura, pero eso sin el respaldo de una ecografía siempre es difícil de confirmar. Posteriormente, el futbolista regresó al Toralín para ponerse en manos del fisioterapeuta, aplicando hielo en la zona afectada y habrá que esperar a su evolución en las próximas horas para saber si podrá jugar este domingo contra el Alcalá. Miguel García fue suplente Durante la semana se había comentado que la principal duda en la alineación para el decisivo encuentro del domingo podía residir en mantener el mismo equipo que jugó en el Val, con el tradicional sistema empleado fuera de casa en el que los dos medios centros defensivos, Gorka y Úriz, comparten titularidad, actuando Miguel por delante de ambos. Lo normal, hasta la fecha, es que en casa entrara Tarradellas en vez de Gorka o de Úriz, pero ayer Tomé sorprendió a todos dejando fuera del presunto equipo titular a Miguel García. De este modo, Rubio actuó bajo los palos, con Jechu, Bornes, Povedano y Fuentes en la zaga; los ya referidos Gorka y Úriz en el doble pivote; Fran, Rubén Vega y Tarradellas en la media punta, con el jerezano Guille arriba. Tomé dividió el partidillo en tres partes. Después de iniciar el trabajo con un trabajo específico colgando balones laterales para preparar el modo de contrarrestar una de las armas más peligrosas con las que cuenta el Alcalá, se inició el partidillo. En la segunda mitad del mismo, Povedano se había quedado fuera por precaución y Soto entró en su lugar. Fue entonces cuando sucedió el percance de Bornes, completando Jesús el dispositivo defensivo. En cuanto a Miguel García, éste entró en juego también en el segundo período, ocupando la posición que hasta entonces había desempeñado Vicente Úriz, por lo que el manchego actuaba junto a Gorka Soria como centrocampista.